La Diosa Está Aquí
Artículo de José Stevens – 19 de Diciembre de 2024
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La Diosa está aquí y siempre lo ha
estado, pero durante largo tiempo ha estado oculta tras los velos de la
negación de la cultura del mundo que ha apoyado al patriarcado, apoyó a una ciencia
divorciada de la espiritualidad, y se volvió desesperadamente adicta al dios
del dinero para detrimento y destrucción de la madre Tierra. Pero ese viejo
paradigma ha visto su fin y uno nuevo está en ascenso, que exige que ella tome
su debido lugar en las vidas de las personas nuevamente. Los eventos del/los
años venideros verán que lo haga.
Información enterrada, secretos revelados, la revelación de mentiras, y
nuevos descubrimientos, harán su parte para cambiar la comprensión del mundo de
quiénes somos y a qué vinimos. Naturalmente será un retroceso mayor de aquellos
que temen perder su ventaja egoica imaginada, pero que así sea. Ese retroceso ya está aquí en la forma de
intentos para aplastar todos los vestigios de las mujeres hacia su igualdad y
libertad. De hecho, estos intentos para aplastar son tan descarados como para
revelar el nivel de miedo creado por el retorno de la Diosa. Cuando presencies el retroceso y las
tendencias generales de los literalistas a restaurar el patriarcado, podrás fácilmente
darte idea de que han ganado y que el movimiento de la Diosa está muerto, pero
eso sería una ilusión más bien masiva. Las almas jóvenes y bebés detrás de eso
no podrán ya prevalecer más, porque la evolución de la consciencia y el aumento
de la población de almas maduras y más antiguas, en una palabra, son
abrumadores. Habrá retrocesos masivos en los cuidadosos preparativos y planes
llevados a cabo para controlar el mundo. La Diosa está en movimiento.
Entonces, ¿quién y qué es la Diosa, y
cómo opera? Primero, aclaremos aquí algunas distorsiones. Hay solo una Diosa,
pero ella tiene muchos rostros y ha aparecido y ha sido honrada bajo muchas
formas diferentes a través de la historia. Ella es Isis, María, Helena,
Bridget, Kali, Tonantzin, Atenea, Electra, Demeter, Juno, Hera, Venus,
Saraswati, Durga, Lakshmi, Parvati, Mujer Búfalo Blanco, Doncella del Maíz,
Guadalupe, Sofía, y así sigue y sigue. Ella es toda la variedad entre nutricia
y masiva destructora, amorosa y totalmente aterradora, cálida y fría como
hielo. Luego, la Diosa no está allí afuera, en algún lugar, sino que vive en la
percepción conciente, en la consciencia que está en todas partes e
infinitamente presente. y es ya un
aspecto poderoso e influyente de quiénes somos. En otras palabras, ella está
dentro de nosotros como un aspecto del Espíritu y ella es nosotros, ya sea que
tengamos un cuerpo femenino o masculino, o uno que puede ser ambas cosas. Luego
la Diosa no es una mujer convencional. Ella es una energía, una energía
femenina seguramente, pero no una mujer humana, ni siquiera nada femenino, y
ella no es exclusiva de las mujeres, tal como la energía crística no es
exclusiva de los hombres aun cuando a algunos les gustaría creer que eso es
así.
Entender estas cosas es crítico para
entender lo que está sucediendo con la raza humana, lo que está sucediendo en
el mundo de hoy, y lo que está a punto de suceder. Podemos hacer este viaje más
difícil de lo necesario, o podemos quitar la lucha de esto y hacerlo una
transformación poderosa, dinámica y liberadora. De cualquiera de las dos
formas, está sucediendo, y no hay vuelta atrás.
Si retrocedemos cuarenta mil años,
estas cosas se entendían bien, pero a medida que el mundo evolucionó y la vida
tribal nómade se transformó en estados nación, y la caza y la recolección se
transformaron en agricultura, la forma en que contamos la historia de la Diosa
cambió, y se usaron metáforas que hoy se considerarían políticamente
incorrectas, y eso es lamentable.
La clásica historia del Jardín del
Edén, así como se la cuenta hoy, no se parece en nada a la historia que se
contaba hace mucho en los tiempos de las tribus nómades. En la versión actual,
una figura de un dios masculino iracundo previno al primer hombre y primera
mujer no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, o serían exiliados
para siempre del paraíso. Por supuesto, según se cuenta la historia actual,
Eva, la mujer derivada de la costilla de adán como un pensamiento posterior del
así llamado Dios, seducida por la serpiente (Satanás), comió del fruto
prohibido y sedujo a Adán a comerlo también. Por supuesto, fueron echados para
siempre del paraíso y todo fue culpa de ella.
Qué tontería. Hace mucho, mucho
tiempo, el árbol del conocimiento fue descripto de manera similar, pero figuras
de Diosas distribuían los frutos del árbol del conocimiento a todos los que
apoyaran su kundalini a subir en su camino a la iluminación. Después de todo, era
el árbol del conocimiento, la metáfora simbólica de la columna humana con su
kundalini ascendiendo. Todo muy natural, todo bueno, todo absolutamente
alineado con la verdad. Nada de tonterías. Entonces, una historia poderosa
basada en la verdad se volvió una historia famosa basada en mentiras y fue de
la sensatez a la tontería.
Al cambiar las épocas y cambiar las
creencias, hubo intentos de explicar el papel de la diosa al pueblo, pero las
distorsiones ya estaban próximas. Muchas historias similares aparecieron para
intentar contar el cuento de la evolución humana desde lo primitivo a lo
sofisticado de maneras que se creía que la gente entendería. Surgieron muchas
historias a través de las culturas, que describían este viaje. El cuento de
Sofía es una historia tal, destinada a ser una metáfora como las historias del
jardín del Edén, no para ser tomadas literalmente, sino metafóricamente.
En esta historia, Sofía, una joven
diosa, vivía con su padre y su hermano en el paraíso con total satisfacción.
Sin embargo, cuando ella creció, empezó a interesarse en encontrar su pareja
romántica, un amante masculino. Ella también se volvió muy curiosa sobre la
vida humana en la tierra y quería saber de eso. entonces, un día ella se escapó
para encontrar a su amante, pero, en su inocencia e ignorancia de las
costumbres humanas, ella era muy confiada, y conoció a una serie de hombres que
se aprovecharon de ella y luego la abandonaron. Para no alargar la historia,
ella sufrió gravemente herida, se deprimió y se perdió, y fue tomada por
proxenetas y traficantes de personas, terminando
como una mujer caída en una casa de prostitución. Ella llamó a su padre y le
suplicó que la rescatara de su situación. Dios el padre, envió a su hermano a
rescatarla y después de toda una odisea la encontró y la rescató. Ella estaba
alborozada y se dio cuenta de que él era el que ella había soñado encontrar
todo ese tiempo. Inmediatamente se enamoró de él y él de ella, y terminaron
consumando su pareja y se volvieron uno. Regresaron al paraíso.
Bueno, esto fue un poco desprolijo,
per ¿qué significa realmente esta historia? Para entenderla completamente
necesitamos retroceder un poco en el tiempo. Cuando esta historia se contó al
principio fue en idiomas nómades que usaron una palabra para Espíritu Creador
que significaba padre y madre. Entonces, es raro que Sofía estaba viviendo con
su padre y su hermano y que no hubiera una madre allí. Cuando esta historia se
tradujo de los idiomas nómades al griego, latín, y demás, Madre se dejó de lado
y solo quedó Padre. Luego ella es identificada como mujer caída, como si ella y
todas las mujeres fueran débiles y necesitaran ser salvadas de sus propias
pasiones, y solo entonces pudieran ser rescatadas por un hombre. Como es usual,
la gente tomó esta historia literalmente, y estas distorsiones se tradujeron en
filosofías sobre las cualidades pecaminosas y baratas de las mujeres, cómo
ellas no merecían un estado igual al de los hombres. Ellas solo eran una
propiedad, buenas para hacer bebés, que luego pudieran ser herederos de las
tierras poseídas y derechos de propiedad para conservar las dinastías. Y quién
era realmente la diosa, eso fue negado. Pero me estoy adelantando en la
historia aquí.
Ahora bien, la historia de Sofía se
vuelve a contar en muchas, muchas otras historias de diversas partes del mundo,
y este es un tema enorme en el que no podemos dar detalles aquí, pero es muy
interesante. Es importante recordar que la historia de Sofía solo es un aspecto
pequeño de la Diosa. Ella también es toda la naturaleza, el nacimiento y la
muerte, la destrucción total y la benevolencia total, el perdón y la bondad. Ella
es el vacío absoluto, la oscuridad chispeante, y la luz increíble. Ella está
más allá de cualquier descripción humana que pudiéramos dar. Para los hindúes
ella es más poderosa que todos los Dioses juntos. Eso nos intimida.
Entonces, volviendo ahora a la
historia de Sofía y de qué se trata realmente la historia. El Espíritu creador,
padre y madre, vive en el paraíso, un reino de percepción conciente y de
consciencia infinito, eterno, no físico. Ellos son una presencia, no dos. Pero
en nuestra comprensión, dieron a luz hijos, un hijo que fue la energía
crística, la más alta vibración que se pudiera experimentar en forma física. La
energía crística es un redentor, una energía que nos recuerda quiénes somos, de
dónde vinimos. Sofía, la hija, es
Psiquis, a veces llamada el Espíritu Santo, la experiencia que tenemos como lo
que parece ser consciencia individual y percepción conciente.
Psiquis es una antigua palabra griega
con muchos significados: respiración mente, vida, espíritu, yo y fantasma. Como
psiquis, cada humano va en un viaje asombroso donde parecemos olvidar quiénes
somos, nos perdemos e imaginamos que somos personas separadas, aisladas del
Creador. Luego nos metemos en toda clase de problemas de ego, lloramos pidiendo
ayuda, y somos redimidos por la energía crística que nos recuerda quiénes somos
y que todos somos uno con el Espíritu Creador. Qué historia; pero es una
metáfora, y no tiene nada que ver con el humano real, personajes masculinos y
femeninos. Tenemos a la madre y al padre dentro de nosotros, tenemos al
redentor crístico dentro de nosotros, y somos psiquis, el aspecto que tiene la
grandiosa aventura. Cuando estamos todos unidos, estamos de nuevo en el
paraíso. Cuando parecemos estar divididos, sufrimos horriblemente. Esto es una
historia clásica de enseñanza, pero se enseña con distorsiones inducidas
culturalmente. La historia no funciona en absoluto si dejamos a Sofía afuera y
eso es exactamente lo que hemos hecho: negamos a Sofía, la Diosa de la
Sabiduría. ¿Por qué ella es sabia?
Porque ella conoce todo el viaje, y se ha vuelto sabia debido a él.
Hemos negado a Sofía porque ella nos
pone incómodos, ella es como una enchilada, la curiosa, la viajera, la que
percibe y experimenta, la confundida y perdida, la buscadora, la encontrada, la
que recuerda. Ella es la que sufre a través del viaje que hace, pero debido a
eso que nos duele, resistimos ese hecho, y al hacerlo la negamos.
Ella es la sabia, la que ha hecho el
viaje y ha aprendido todo lo que hay que saber. Ella es nuestra consejera sabia
y nos lo dice sin adornos. Es por eso que fue una gran maestra para los
antiguos griegos, los paganos, los gnósticos, los esenios. Ella tiene compasión
de nosotros, nos cuida, ella nos conoce como nadie porque ella es nosotros.
Ella no es mujer, no es hombre, sino lo femenino en ambos. Y ella no está
completa hasta que ella se une con la energía crística que la redime y la hace
una con esa energía también. Y ella ha regresado a la Madre Padre Dios y es una
con eso. Ella nos recuerda que ya hemos regresado también, porque ¿cómo
podríamos no ser uno con nuestro creador? Porque estamos identificados con
estar en el viaje, simulamos que no hemos completado el viaje, pero al final
del día nos damos cuenta de que lo hicimos. Es por eso que el gran Sabio
Taoísta se ríe largo y tendido con la broma cósmica de todo esto.
La Diosa en nosotros solo puede ser
negada por cierto tiempo, y el tiempo de recordarla ha llegado, porque no podemos
hacer más progreso sin ella. La raza humana ha decidido que es hora de
recordarla y no hay real vuelta atrás de esa opción. Todas las profecías más
significativas hablan de esto, y la mayoría de ellas son bastante antiguas,
miles de años atrás. Prepárense.
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Traducción: M. Cristina
Cáffaro