Canalización
de Kryon por Lee Carroll
Ante
la Hermandad Femenina Lemuriana (83)
Saludos, queridas damas, Yo Soy Kryon del Servicio
Magnético.
Mi socio se aleja; él siempre lo hace para honrar al
femenino sagrado, que está actualmente aquí en esta reunión. ¿Cuántas de
ustedes creen esto? Podrían decir, “Eso es una pregunta cargada”. ¿Creen que
hubo un propósito aquí que las alertó de algo llamado Hermandad Femenina
Lemuriana? Me gustaría hacer eco de las canalizaciones del día. Muchas de
ustedes no estaban con nosotros en ellas, de modo que quiero repasarlas un poco
y continuarlas para ustedes.
Hablamos de un tema llamado la Máquina del Amor, y eso es
una metáfora. El amor es la energía creadora de lo que llaman Dios o Espíritu;
la máquina es la intervención. La máquina es lo que las lleva a ustedes a saber
que son un ser humano que es parte de este rompecabezas de cómo llegaron aquí y
qué pasó entonces - por supuesto,
Lemuria. Hablaré de eso en un momento…
Es hora de hablar de esto. La Hermandad Femenina
Lemuriana está creciendo. No te preocupes, Mele´ha, no te voy a dar otras
instrucciones (se ríen). La Hermandad
Femenina Lemuriana está creciendo. Solo quiero decir estas cosas: Mele´ha,
estás de acuerdo al programa, estás en el punto justo, estás en el marco de
tiempo que fue programado para que pudieras ser la que diera las instrucciones,
la ayuda de los mensajes edificantes, el consuelo durante estos tiempos
difíciles. Ya te hemos dicho a ti y a quienes escuchen, que las mujeres están
asumiendo la carga de esta época durante el Covid. La Hermandad Femenina te
pertenece a ti, querida, tú la estás manejando y eres ciertamente la que vino
para hacerlo. Las lecciones, ungidas; los procesos, ungidos; los procedimientos
que estás recibiendo intuitivamente, incluyendo la enseñanza de la Rueda
chamánica para las mujeres. Las chamanas se beneficiarán con lo que tú has
hecho durante esta última década o más. La Hermandad Femenina te pertenece.
Y hemos dado esta información para que no haya duda, que
cualquiera que escuche sepa quién fue la que fue ordenada, se podría decir,
como un alma que entraría en este planeta en esta época de su vida.
Ahora bien, en eso, se podría decir en esta máquina de la
que hablamos, esto sería la interacción con propósito de las piezas del
rompecabezas que producirían una cosa así. Se podría decir que es la máquina,
un sistema de guía con propósito por el Espíritu, que por ejemplo pone a
Mele´ha en el planeta en el momento apropiado. Una máquina que observando el
libre albedrío, la tiene a ella sola en esta época. Es difícil describir cómo
tales cosas podrían ser apropiadas, pero son para el planeta, y ella lo sabe.
Entonces, damas, ustedes tienen que venir a este
reconocimiento: ¿son ustedes parte de la máquina? Hubo intervención por parte de la creación de
este planeta, el momento en que se puso aquí la luz, y especialmente la
cronología en que llegaron las Madres de las Estrellas.
Esa intervención de que hablamos las pone a ustedes, con
otro rostro y otro nombre, pero con la misma alma, en un lugar de recordación;
ustedes estuvieron allá. Lemuria perduró por largo tiempo. Muchas de ustedes
nunca se conocieron entre sí. Pero lo que recuerdan, lo que es esa parte que
las trae a la reunión, a preguntarse “¿Esto es para mí?” Eso es intervención.
Mi socio tiene un nombre para eso: y ese nombre que les voy a dar, es “yo te
hice mirar”. Eso es lo que él dice, cuando algo lo hace ir en cierta dirección
debido a lo que es la intuición que él siente como la guía del Espíritu.
Hemos dicho esto antes. Damas, ustedes tenían esto al
nacer. Esto las alía con aquello que no solo es sus hijos, sino espiritualmente
una alianza con aquello que empiezan a reconocer. Lo diré: ustedes tienen libre
albedrío, pero están rodeadas de muchas cosas en ese Departamento de Te Hice
Mirar. Verán, nosotros somos libres para intervenir con cosas alrededor de
ustedes, con objeto de empujar y tirar; se nos permite intervenir en esas áreas
de la evolución, en esas cosas que las pondrían en el lugar correcto en el
momento apropiado, para que la consciencia empiece a concordar con la
intervención, si captan este punto.
En otras palabras, hay una energía, una dirección del
Espíritu, para estos tiempos – no solo para pasar el 2012, sino incluso el
tiempo del Covid – que las pone en un lugar de hacer la pregunta: ¿Yo fui
lemuriana? ¿Recuerdo alguna de estas cosas? Entonces pongámoslo en claro: no
les estamos pidiendo que recuerden de la misma manera que recordarían lo que
comieron en la cena. Estamos diciendo que la recordación es akáshica; esa es
una recordación de cuerpo entero. Es algo que les daría escalofríos ahora mismo
si yo hablara al respecto. Ustedes estuvieron allí. Estuvieron allí para
escuchar a las Madres de las Estrellas, para oír su voz, algo que nunca
olvidarán, ya les dijimos. Como no olvidarían la voz de su mamá, nunca. Pueden
extrañarla, pero no la olvidarán cuando ella ya no esté. Y ustedes no olvidan,
en ese akash, esa voz que les enseñó.
Las mujeres la oyeron, y los hombres no. Y ya les
contamos eso antes. Existe una alianza de recordación allí para ustedes; eso
también es intervención. Que ellas
vinieran e intervinieran para empezar a enseñarles cosas sagradas, con objeto
de que ustedes despertaran muchas vidas más tarde, con la información que
aprendieron en aquel entonces.
¿Es realmente posible que la información aprendida en
vidas pasadas pudiera ser recordada en tal medida que luego penetrara en lo que
es ustedes? Penetrar significa que está en cada célula, y la recuerdan. La
recuerdan de una manera que le dice a su psiquis. “Yo sé. Lo reconozco. Estuve
allí.” Y lo más grande: “¡Yo pertenezco a esta energía!” (se ríe). Pertenezco a eta energía. No se separen a sí mismas de
aquello que sienten que es ustedes. Esto no es simplemente una organización que
están experimentando, una enseñanza que están experimentando. Quiero que
empiecen a pensar en esto de una manera diferente. Esto es la energía del
hogar. Es el primer lugar en que estuvieron como seres humanos, para oír,
reaccionar, escuchar a las Madres de las Estrellas. Y cuando empiezan a
reconocerlo en las capas de enseñanza que están aquí, en la Hermandad Femenina,
en la Rueda Chamánica, las chamanas que salgan de esto se darán cuenta que
vienen al Hogar. Y así es como se supone que lo sientan. No se sorprendan si
empiezan a sentirlo así. Es una adhesión que va más allá de una camaradería con
las otras damas. Es una camaradería con lo que es su alma, una camaradería con
lo que es la información, y empiezan a reconocer eso que Mele´ha está empujando
hacia adelante con la información de las Madres de las Estrellas.
Esto es la Hermandad Femenina; llena de mujeres que
desean ir al hogar. No físicamente; no es un deseo de dejar el planeta; es un
deseo de convertirse en parte de él, de la manera en que solía ser. Y eso da
paz, realmente lo hace.
¿Están escuchando, damas? Yo sé quién está aquí. Yo sé
quién escuchará esta canalización más tarde. Le trae paz a su alma entender de
qué forman parte; poner una mano sobre el corazón de cierta manera y decir,
“Gracias, gracias, gracias. Yo sé que las cosas mejorarán. Yo sé que las cosas
estarán bien, porque hay intervención que me trae a un lugar como este”. Las hice mirar... (se ríe); las hice mirar.
Percibir con esta reunión, tal vez con un nuevo fervor,
un entendimiento, de lo que verdaderamente está pasando aquí. No es solo una
reunión; no es solo una asociación, no es solo un grupo. Un hilo que las
conecta a aquello que fue la enseñanza original donde están en su hogar.
Y así es.
Kryon
Transcripción
y traducción: M. Cristina Cáffaro