Proyecto:
BANCO DEL PARQUE
Jim
Self - Mastering Alchemy: Herramientas de Preparación
Palabras
Me gustaría
ahora repasar unas cuantas de esas mismas palabras, tal vez agregar algunas y
hacerlo de una manera muy llana, para la actividad en la que van a participar.
Queremos anclar realmente estas palabras, este conjunto de palabras con que
jugamos: feliz, seguro, señor, presente, muy capaz, misericordioso, al mando;
estas no son palabras arbitrarias. Estas palabras abren puertas asombrosas; no
son elegidas al azar, son muy específicas. A medida que empieces a entretejer
estas palabras en tu tela, en la trama de tus prendas que vas a usar,
encontrarás que empiezan a suceder cosas asombrosas, simplemente por sostener
la vibración empiezas a atraer personas hacia ti de manera muy distinta de como
lo hacías en el pasado.
De modo que, de
todo este trabajo que estamos haciendo – y ya lo dije al principio – esa rosa
es una de las partes más importantes, así como la conexión a tierra lo es. Pero construir estas palabras y empezar a
presentarte intencionalmente desde esas vibraciones, es el trabajo más
importante que puedas dominar en todo esto que estamos haciendo. Aun cuando uno
va más allá en los cursos de Mastering Alchemy, el crear esta plataforma de
palabras y ser capaz de entretejer una y otra de estas palabras – según sea la
situación que se te presenta – es absolutamente maravilloso para poder crear la
realidad que deseas.
Entonces vamos
desde aquí; me gustaría llevarte por esas palabras y te pediría que te las
pruebes, que realmente las sientas, estamos solo tú y yo, y yo no cuento.
Póntelas, siéntelas, rueda con ellas, realmente entra dentro de ellas,
aprópiatelas, y veamos adónde podemos llevar esto. Entonces me gustaría que te
recuestes en tu asiento, tomes una respiración, relajes el cuerpo, permanece en
el centro de tu cabeza y pon tu intención. Y tal vez como ya conoces “feliz”,
siéntete feliz para empezar. Aquí mismo, toma un par de respiraciones, lindas,
suaves, circulares, con los ojos abiertos y gusta de ti mismo, y luego lleva tu
atención a ti mismo, directo al centro de tu cabeza, y toma conciencia de ti
mismo, simplemente toma conciencia de ti. Nota tu pie izquierdo; percibe si tu
codo derecho todavía está allí. Y al tomar esta próxima respiración simplemente
permite que tus párpados se cierren y continúa con la respiración, linda,
consistente, suave.
Ahora, desde el
centro de tu cabeza, recuerda un momento en que fuiste feliz y simplemente pon
tu atención en aquel momento, como si estuvieras allí. Sosteniendo esa energía,
siente la emoción de felicidad; permite que las comisuras de tu boca sencillamente
se curven hacia arriba, y permite que la sonrisa empiece a manifestarse en tu
cara; feliz, siente ese sentimiento.
Y luego permite
que ese sentimiento incremente casi hasta una risa, simplemente feliz; siente
sencillamente esa vibración. Y luego permite que el recuerdo se aleje y
reconoce “feliz” en tu ahora, en este momento; no hay causa y efecto de
“feliz”; es una opción, una opción de 4ª dimensión; tiempo presente, ahora
mismo. En ese “feliz”, encuentra el
sentimiento de gustar de ti mismo. Ahora bien: esto es ligeramente distinto de
“feliz”; cambia tu atención levemente y ten en tu cabeza la afirmación “me
gusto”. No se necesitan segundas opiniones, en absoluto. Y luego simplemente
siéntete feliz.
Permite que el
cuerpo se relaje. Permanece justo en el centro de tu cabeza y toma nota de ti
mismo sintiéndote feliz. Continúa la respiración. Ahora pon una nota en esto,
como si fuera un marcador en tu computadora, simplemente sabe esto: en el
momento siguiente te voy a pedir que estés feliz, no se necesita pensar en ser
feliz, simplemente notas este sentimiento y encuentras “feliz” como
sentimiento, no hay realmente una búsqueda, simplemente sabes que está allí,
siéntete feliz.
Luego cambia tu
atención hacia otra vibración: simplemente neutral. “Neutral” es tranquilo, no
hay emoción, todo funciona, no lo estás usando, simplemente cambias de “feliz”
a “neutral”. Un espacio tranquilo; continúa la respiración. Y luego en
“neutral” puedes también gustar de ti mismo, encuentra el “me gusto” y nota que
ese sentimiento surgirá, si lo permites, y todavía neutral.
Y desde
“neutral”, cambia tu punto de atención y encuentra el sentimiento, la
sensación, de estar seguro, en lo cierto. Ahora bien, algunas personas nunca
estuvieron seguras, está perfectamente bien, pero si fueras a simular que estás
seguro, ¿cómo se sentiría eso? Toma una respiración y permite al cuerpo
enderezarse en el asiento, los hombros podrían ir hacia atrás, la cabeza
arriba, “estoy seguro”. Déjame hacer una pregunta tonta: ¿sabes cómo ponerte
los pantalones? ¿Estás “seguro” de que
sabes ponerte los pantalones, has tenido éxito en ponértelos? ¿Estás seguro?
“Sí, estoy seguro, sé cómo ponerme los pantalones”. Simplemente siente esa
presencia de certidumbre, seguridad, “estoy seguro”. Continúa la respiración;
gusta de ti mismo. Somos solo tú y yo – yo no cuento.
Luego encuentra
otra vez esa vibración de “neutral”: es una vibración tranquila. Todo funciona,
nada está en uso. Y encuentra la vibración de veteranía, de precedencia. Tal
vez el cuerpo se quiera mover; este es mi cuerpo. Yo soy. Sencillamente eres
dueño de ti, eres el señor, no hay segundas opiniones, no estás preguntando a
nadie si está bien ser dueño de ti mismo; sencillamente sé dueño de ti, “este
es quien yo soy”.
Mucha gente se
ha metido en el centro de tu cabeza diciendo “tenemos una idea mejor que la
tuya” has abandonado tu precedencia o señorío, les permitiste deslizarse
adentro, dando credibilidad a su verdad. Sencillamente recupera tu precedencia,
tu autoridad sobre ti, no hay empujones, no hay fuerza, no hay exigencia,
simplemente decide encontrar el sentimiento de ser el que tiene autoridad sobre
ti. Expándelo hacia el concepto “Yo
puedo estar a cargo de mi vida, soy la autoridad para tomar decisiones”. Justo
aquí y ahora, en el momento presente, toma tu autoridad.
Y desde esta
autoridad, siente el sentimiento de estar seguro, es como cambiar el punto de
atención, y allí está el sentimiento: seguro de ser el dueño de ti mismo.
Nuevamente deja que el cuerpo se relaje, no hay esfuerzo. Otra respiración - o
dos. Luego en tu seguridad, en tu autoridad, sencillamente estar neutral en
esas vibraciones; siente el sentimiento de certidumbre, de autoridad, y en
neutral; no hay empujón, no hay esfuerzo, nada que cortar con una espada.
Y luego
encuentra “feliz”. Permite que “feliz” se entreteja con seguro y autoridad.
Otra respiración. Aquí empiezas a moverte entre los velos de la consciencia, se
están adelgazando, solo con esta intención de estar seguro, feliz, dueño de ti
mismo. Verás, nada puede invalidarte cuando sostienes estas vibraciones; todo
lo demás se cae, las opiniones ajenas se caen.
Sostén tu
atención aquí, feliz, y luego reconoce tu presencia. Estás establecido en tu
presencia: “este es quien yo soy”. Otra respiración. Al sostener estas
vibraciones, todo lo que “yo no soy” se disuelve, desaparece, no está en tu
presencia.
También siente
la sensación de ser capaz. Las opiniones ajenas aquí no cuentan. Otra vez, si
eliges sostener esta vibración de “yo soy capaz” no hay discusión; “soy capaz.”
Otra respiración. Sube esa energía un
poco más, siéntete capaz.
Y al permitir
este “capaz” ten la sensación de ser “poderoso”; “yo puedo crear”, puedo traer
cosas a la existencia, yo soy capaz. No hay espada, no hay esfuerzo, es simplemente
“yo soy”. En el “yo soy” todo aquello en que pongas tu atención fluye hacia ti.
Yo soy capaz. Soy feliz.
Luego cambia a
la vibración de otro sentimiento. Sencillamente encuentra la vibración de ser
misericordioso. Hay un gran poder en la misericordia; no hay debilidad. La
misericordia permite que el flujo se vuelva coherente, permite cooperación,
co-creación, permite la confianza, permite. Sencillamente sé misericordioso. Sé
capaz. A medida que asumes “capaz”, la capacidad de ser misericordioso se vuelve
muy disponible, porque no se discute. A veces retrocedes, permitiendo a otros
que se experimenten a su mismos en su grandeza, a veces tienes que conducir a
otros misericordiosamente hacia su éxito.
Luego cambia
hacia esa palabra “comandar”. Otra vez: no hay empujón, no hay esfuerzo,
simplemente hay una capacidad para liderar, para empezar a ayudar, edificar,
brindar bienestar. Puedo comandar mi realidad en mi realidad. Brindo dirección
para mí mismo, y para otros cuando la piden. Entonces en esa sensación de
comandar tu presencia, encuentra “capaz” y siéntete autoridad en tu presencia.
Otra respiración. No hay nada que hacer más que sentir estos sentimientos. Y
puedes estar seguro. “Yo puedo comandar, dirigirme a mí mismo, puedo ser capaz.
Yo soy autoridad en mí. Me gusto. Simplemente encuentra ese sentimiento “me
gusto”. Estamos solo tú y yo, y yo no cuento. Y sé feliz. Un poco más feliz.
Relájate en el cuerpo y permanece neutral. Todo funciona; estoy seguro, soy
capaz, soy dueño de mí, y no necesito ir a ningún lado, no hay nada que
reparar, no hay nada roto.
Luego elige una
de esas palabras. Sé esa palabra. Y entreteje esa palabra con otra palabra que
elijas en el grupo de que hablamos
Y gusta de ti
mismo. Encuentra el sentimiento de “me gusto”. Y luego hay otra variante, un
sentimiento levemente diferente: siéntete complacido contigo mismo. Encuentra
el sentimiento; es levemente diferente de “me gusto”. Estoy complacido. Otra
respiración. Y al estar complacido contigo mismo, siéntete capaz.
Otra vez, toma
una de esas palabras, siente la vibración, sé esta palabra, y esta palabra elegida
entretéjela con “feliz” y simplemente toma conciencia de ti mismo en el centro
de tu cabeza, siendo feliz y con la palabra que elegiste.
Y sin cambiar
este sentimiento, este entretejido de palabras, sostén este sentimiento y
simplemente toma conciencia de la habitación a tu alrededor, feliz en la
palabra que elegiste. Permite a ese “feliz” asomar en tu cara, un poco más, en
una sonrisa. Y sostén tu atención en estos sentimientos, y permite que tus
párpados se abran, simplemente notando el sentimiento. Luego permite que la
habitación entre en foco, y siéntete feliz, capaz, dueño de ti, seguro, muy
misericordioso, al mando, muy presente, lo que hayas elegido. Toma otra
respiración. Gusta de ti mismo. Toma
conciencia de “yo soy feliz” y la palabra que elegiste. Permite que esa sonrisa
se haga más grande. Entraremos y saldremos de estas palabras, más y más, y
agregaremos a este saco.
Ponte de pie,
estira el cuerpo, gusta de ti mismo, sé feliz.
En español en
audio :https://masteringalchemy.com/content/tools-bench-sitters
Transcripción y traducción: M.
Cristina Cáffaro