Canalización de Kryon por Lee Carroll
en San José, California, el 15 de enero de 2017
El Innato Realzado
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Es
el final de dos días, y muchos en este salón se han reunido para ambos, y en
ese proceso ha habido una continuidad en la consciencia. Aquí ha habido mucho
para sentir, hoy y ayer, si ustedes lo permitían. Todavía hay algunos
frustrados porque no están sintiendo nada. Podemos hablar sobre ciertas cosas,
canalizar sobre ciertas cosas, pero la realidad es que no lo están captando en
absoluto. Casi todos los presentes están
aquí con un propósito de aprender cómo ayudarse a atravesar este cambio.
Queridos,
si no se reconoce el cambio las cosas pueden empeorar, porque no pueden insertar un paradigma de la
vieja energía en la nueva energía. No pueden seguir haciendo en la nueva
energía lo que habían estado haciendo antes, no funciona. Más tarde o más temprano verán esta
disfunción propia si no ingresan en esto, en esta nueva forma de pensar, en
esta energía que está dispuesta a apoyarlos .
Lo
hemos dicho una y otra vez: el viento sopla de atrás, pero si no izas tu vela,
eso no importa. Y esto va para todos
ustedes. Hay cosas aquí que no han esperado, en una energía que realmente está
allí para ustedes - o bien no lo creen. Porque siempre trabajaron duro para sí
mismos, por sí solos, haciendo lo que necesitaban hacer, y de pronto la idea de
dejar de lado algo de eso no tiene sentido.
O bien tienen miedo. Los acompaño a atravesar algo.
Llamaré
a este mensaje "El Innato Realzado".
Es similar a otros temas que hemos dado antes, pero este es para este
grupo. Muchos de ustedes han sentido algo especial durante estos dos días. No
lo atribuyan a los expositores, porque no proviene de ellos. Esta es una
energía de benevolencia, amor y compasión que proviene del interior de cada uno
de ustedes, bañándolos con la belleza que se merecen. No es exterior; ese es
uno de los mayores cambios de paradigma de esta época: que la belleza viene del
interior.
Cuántos
de ustedes pasaron su vida con las manos extendidas agradeciendo a Dios,
pidiendo a Dios, queriendo que Dios... solo para darse cuenta ahora de que cada
cosa provino del Dios interior. Oh, no es eso todo lo que está en el interior;
su biología está diseñada para escuchar lo que ustedes dicen. Les traigo algo
en qué pensar, y ahora lo voy a acrecentar.
Hay
un tema común para los que piensan formas alternativas para la salud, y se
llama homeopatía. Voy a estudiarlo por solo un momento de manera muy fáctica,
3D, y quiero que escuchen con cuidado porque esta es la premisa de lo que
vendrá.
La
homeopatía ha estado con ustedes los humanos durante largo tiempo. La premisa
no es científica, y en algunas culturas ni siquiera se acepta el nombre. De hecho hay científicos que se burlan de
ella. He aquí cómo funciona: una tintura, un remedio, de una composición
química tan pequeña que es difícil de medirla siquiera, en partes por millón,
que es muy minúscula, se pone bajo la lengua. El remedio está diseñado para
ustedes, para lo que los aqueja. Lo
ponen bajo la lengua y el cuerpo ve la intención de quienes compusieron el remedio
y lo tomaron. Y el cuerpo lo ve, sigue las instrucciones, y se sana, se cura,
se libera de los problemas. Esa es la base de la homeopatía.
Se
les enseñó que si lo tomaban, también pusieran intención, porque eso entonces
favorece la curación que está allí para ser realzada. Y cuando la ciencia mira
esto, dice que no hay manera de que esto funcione. Tiene que ser solo mental, porque no hay
química que pueda causar una reacción en el cuerpo, está demasiado diluida,
simplemente es demasiado pequeña.
Queridos,
este método fue usado durante cientos de años, mucho antes que las drogas.
Mucho antes de que ustedes siquiera tuvieran la aspirina. Así es como los
humanos buscaban curación en él. No es nuevo, y funciona. Y millones de
personas lo usan hasta hoy en otros continentes, mucho más que ustedes, y se
aferran a la verdad y la realidad y la tridimensionalidad de esto. Es algo que
funciona.
Entonces
ustedes tienen un sistema que se sabe que funciona, que no es científico, en el
que el Innato de su cuerpo ve algo que están haciendo por medio del remedio, de
la tintura, y ve su intención, y cura. ¿Cómo llaman a esto, además de
homeopatía? Sería conciencia del
Innato. El Innato está listo para actuar
con lo que ustedes le dan. Durante años y años han visto esto, trabajan con
ello, lo creen.
¿Saben
qué es gracioso? Que hay cirujanos en su
país que prescriben una receta o indican un producto sin receta para obtener
cierta homeopatía que impida las cicatrices. Y cuando ustedes dicen,
"Bueno, ¿cómo puede ser que una homeopatía funcione y otra no?" ellos
dicen:"Simplemente tómelo". No hay reconocimiento en una manera u
otra, simplemente saben que funciona. ¡Lo hace!
Entonces,
en un momento ampliaremos esto. Esta conciencia del Innato está más acrecentada
que nunca; es parte del nuevo humano y está lista para más cosas. Quiero hablar
en este momento a este grupo: ¿qué tal si les digo que en cada ser humano hay
una conciencia del Innato, ahora mismo, incluso podrían decir que está con los
ojos muy abiertos como manos extendidas que dicen "¿Qué más puedo hacer
por ti?" Tu propio cuerpo está a tu
lado para ayudarte.
Esto
es química en su plenitud, está en el ADN, es el Innato y está enlazado con tu
akash y con tu Yo Superior. El Innato es un bello sistema de conciencia; solo
que para la química conocida no tiene reacciones químicas. No solo hace cosas
en la homeopatía; ¡hace todo!
¿Alguna
vez te preguntaste qué es realmente la remisión espontánea? Es el Innato en su apogeo. ¡Eso es tú
contigo, perfecto! ¿Te interesa? ¿Qué puedes hacer, ahora mismo? Oh, tendría que darte escalofríos. ¿Qué
podrías hacer ahora mismo? Es un poquito
distinto de lo que piensas. ¡Oh, hay tantos temas!
El
Innato está listo para ayudar a tu consciencia a dejar de lado cosas que ya no
necesitas, que ya no funcionarán. Si estás en actitud defensiva, en esta nueva
energía no va a funcionar. ¿Tienes botones que al ser presionados te hacen
enojar? ¿Tienes botones que te ponen
ansioso con solo oir una palabra o ver una situación y puedes literalmente sentir
que tu estómago se revuelve? ¿Te
gustaría indicarle a tu cuerpo que suelte eso?
¿Qué tal si instruyes a tu cuerpo para soltar cualquier cosa inapropiada
para la belleza que tú eres?
¿Funcionará?
Ahora
bien; algunos escuchan esto en este momento y dicen: "Esas son solo
palabras. Probablemente no funcionará."
Y para quienes dijeron eso, no funcionará, porque es la actitud misma
que crea una barrera la que también crea una disfunción en todo este proceso.
Quiero
que recuerdes la tintura. Es pura, no
tiene sesgo. Bajo la lengua. El cuerpo la ve y obedece. ¡El Innato quiere lo
que es bueno para ti! Este Innato es la
misma cosa a la que le haces testeo muscular. Es parte de ti, diseñada para
hacerte vivir más tiempo, diseñada para que estés más cómodo, para
ayudarte y para darte información.
Y,
queridos, esto está realzado y se acrecentará aún más, ¡y es una lástima si no
lo usan! ¿Por qué no lo usan todos? El hombre sentado en la silla necesita usarlo
también. Soltemos algo. ¿Qué será? "Querido Innato" podrían decir con
el hombre en la silla: "Querido Innato, hoy suelto todas las cosas
inapropiadas que me ponen ansiosos. Hoy
suelto todas las cosas inapropiadas que me hacen menos saludable." ¡Esta es una época importante para soltar
cosas que no funcionan! Y especialmente
aquellas que ustedes creen que no dominan, porque sí tienen control de ellas.
En
la ciencia hay experimentos que realmente muestran que las células escuchan a
la consciencia; que la química se crea desde la consciencia; se ha demostrado
que el cuerpo está literalmente escuchando al ser humano mucho más que lo que
jamás pensaron. El Innato es aún más
grande que eso.
"Querido
Innato, suelto la frustración que me impide avanzar. Querido Innato, suelto toda la palabrería que me impide
avanzar."
Esto
es una orden; no es un deseo; como la tintura es una orden, que le dice al
cuerpo: "Aquí está el pedido que hago. Aquí está lo que va a suceder,
porque mi consciencia está aliada con mi yo espiritual y con mi Innato." Es un sistema de benevolencia. Con el Innato,
no deseas que suceda; cooperas y le indicas.
Sobre
este tema hubo muchas preguntas; una de ellas es: "Si el Innato es tan grandioso, ¿por qué
simplemente no lo hace?" Queridos,
les diré por qué: la premisa misma de la vida, toda la configuración con su Yo
Superior, con la espiritualidad, dice que ustedes tienen libre albedrío. Tienen
libre albedrío para matarse. Pueden
hacerlo lentamente, si quieren, con malos hábitos, con malas expresiones, o
pueden hacerlo todo de una vez. Ese es
su libre albedrío. Y el Innato está allí listo para recibir instrucciones.
Si pasan su vida sin entender nunca que le pueden
hablar a su estructura celular, su cuerpo simplemente hará lo que sea que
quiera hacer, en plena disfunción y desequilibrio. De allí provienen las enfermedades. ¿Sabían
que la ciencia ha demostrado que los que están alegres y se ríen mucho viven
más tiempo? Porque la estructura celular está equilibrada, hay una consistencia
y una coherencia que colaboran para mantenerlos vivos. Es la risa y la alegría. Estoy hablando de instrucciones para la vida.
¿Cuáles son hoy tus instrucciones para tu cuerpo?
Te
diré: todo lo que tienes que hacer es soltar cosas. ¿Qué hay de la cuestión de
la autoestima? ¡Aquí vamos otra vez! ¡Es mucho lo que
obstaculiza! Queridos, soltemos todo lo
que alguien les dijo respecto a quiénes son ustedes.
"Suelto
todo lo que defina quién soy. Querido
Innato, aquellos que me han hablado, los sistemas que me hablaron, incluso las
estructuras, y los seres queridos que me hablaron; yo suelto la información que
no sea majestuosa para con mi cuerpo!"
¿Qué tal eso? ¿Pueden
hacerlo? ¡Hagámoslo juntos!
Hombre
en la silla, escucha: esto va para ti también.
Soltar las cosas que son inapropiadas; el Innato sabe cuáles son. Acaban de dar permiso para moverse a un lugar
donde sentirán el viento a sus espaldas. ¡Y se irán de este lugar sintiéndose
distintos! Y lentamente, con el tiempo,
empezarán a ver el cambio.
Algunos
humanos sienten que hacer ejercicio es duro, y no quieren hacerlo. Y habrá
quien les diga: "Sabes que debieras hacerlo." Y dicen: "Sé que
debiera hacerlo." Y cuando
finalmente un amigo, o alguien, le dice: "Te acompaño" (se ríe)
va a un lugar donde hace ejercicio o donde camina, o corre o lo que sea,
y hace un poquito. Regresa y dice: "Eso estuvo horrible." (risas del público) Luego el otro dice: "Hagámoslo otra
vez" y lo hace otra vez. Tres,
cuatro, cinco veces, y cuando ya casi está listo para decir "¡Esto es una
tontería!" se empiezan a ver los resultados. Solo un poco.
Y de pronto se vuelve fanático, y está afuera antes de la salida del
sol, corriendo alrededor de la manzana (jadea
- el público ríe). ¿La diferencia?
Se pudo ver el resultado.
Queridos,
es exactamente así. Lo que hacen hoy, ahora mismo, empezando lentamente
conmigo, su Innato lo oirá - si hay intención pura - pero si lo hacen porque están en un grupo,
no funcionará. Pero si la intención está, comenzará un proceso, y cuando
empiecen a ver los resultados estarán
más cómodos consigo mismos, dormirán mejor de noche, sin preocuparse de
las cosas que los preocupan. Empezará a regresar el factor de la alegría, de
modo que despertarán contentos, no con dolor ni ansiedad, ni sufrimiento, ni
preocupación ni nada de esas cosas. Eso es cosa vieja. ¡No es para
ustedes! Y empiezan a sentirlo y a saber
que esto funciona. Y luego empezarán a buscar cosas específicas para dejar de
lado y soltar, que son de ustedes, solo para ustedes; muchas de ellas están en
su akash, ya lo saben, ¿no? Las llevan
consigo y siguen empujando y siguen.
"Querido
Innato" podrías decir, "suelto cualquier cosa, todas las cosas que
están en mi registro akáshico que me impiden ver mi magnificencia hoy."
¡Véanlo hecho!
Es
por eso que vinieron. Es por esto que
vinieron. Que esto sea el comienzo de muchas sesiones de liberación para
ustedes. Y que sea que ustedes vean los resultados. ¡Y corran alrededor de la manzana antes de la
salida del sol! (risas del público)
Y
así es.
Kryon
Desgrabación y
traducción: M. Cristina Cáffaro