27 enero 2017

Kryon ante la Hermandad Femenina Lemuriana (31)

Canalización de Kryon por Lee Carroll
ante la Hermandad Femenina Lemuriana (31)
en San José, California, enero de 2017

Saludos, queridas mujeres, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Mi socio se aparta. Él no está enterado  de lo que se dice; esto es en honor del género de ustedes; no hay secretos.  Quiero hacer de este un mensaje a la familia, y lo que quiero decir con eso es lo que dije durante la última canalización en este mismo salón.
Aquí hay una camaradería, y quiero que estos sean mensajes de amor; no necesariamente informativos como suelen ser.
Si consideran los cambios y transformaciones de género, y lo que un género teme, al contrario del otro, ustedes son distintas.  Cómo reaccionan ante el cambio es diferente, y difiere por razones de su género. Esta es una extensión del último mensaje que fue sobre su reacción y su consciencia ante el cambio.
Podrían decir que para un género el cambio resulta más duro que para el otro, y tendrían razón. Ahora bien, cuando hablamos a un auditorio general con ambos géneros, hablamos con una generalización respecto al género, pero no aquí. Porque todas ustedes tienen esto en común: que vienen a este lugar y se presentan como mujeres, pero la otra cosa que tienen en común es algo que ya hemos mencionado antes. Lo decimos otra vez: ¿cuáles son las probabilidades de que hayan venido a esta vida disfrutando hoy de este género y también lo hayan tenido en Lemuria, donde puede que hayan  participado de aquellos años iniciales y del comienzo de una humanidad iluminada que conoce la diferencia entre luz y oscuridad? Esa es la historia de la Creación en que ustedes participaron, y fue entonces que las mujeres llevaban la antorcha.  Y esa antorcha era lo que hoy llamarían chamanismo; en esa época era simplemente el liderazgo normal de las mujeres.  Ustedes tenían esa herramienta que las conectaba primero con el Espíritu, y de eso quiero hablar.
Esa herramienta especial que llamaríamos percepción conciente realzada o intuición, es biológicamente verdadera: el cerebro de la mujer está construido de manera diferente del cerebro del varón. Y eso, básicamente, es para la crianza de los niños, de manera que ustedes puedan estar más concientes. Los lóbulos de su cerebro están conectados atrás, y los de los hombres no.  Lo que sucede es que ustedes tienen una intuición incrementada, que las hace más concientes para cuidar a sus hijos.
Pero la consecuencia de eso es que también activa una conexión con la Fuente Creadora . ¿Tengo que decirles, damas, que las mujeres despiertan más rápido que los hombres en cuanto se refiere a las cosas espirituales?  Todas las reuniones espirituales en todo el planeta están llenas de mujeres - y los hombres van, si quieren.  Entonces no es una sorpresa ni un impacto si les digo que ustedes estaban tempranamente conectadas con la Fuente Creadora.  Eso de por sí les prueba lo que he dicho todo el tiempo: que el papel de las mujeres en los tiempos muy, muy antiguos era conectarse para los varones. Y entonces ustedes eran las que recibían los mensajes, las que sentían los potenciales; lo que hacían para sus hijos, también lo hacían por la tribu y por la civilización. Se conectaban y ayudaban a guiarlos a puertos seguros. Eso es lo que ustedes hacían.
El cambio es difícil para las mujeres, y la mayor dificultad está en el remanente que acarrean. El cambio muchas veces se les presenta no como cambio sino como dificultad.  Su akash no clasifica las dificultades en duras, medianas o fáciles.  En cambio, la dificultad está, y se presenta ya sea con el cambio o con cualquier otra cosa, y ¿qué es lo primero que piensan ustedes?  ¿Qué está más presente en su mente,  como mujeres que son? Les diré: son los hijos que han perdido.  No hay dolor mayor en el planeta que el de una madre que pierde a su hijo.  Nunca se va, queda grabado en su akash para siempre. En cuanto a su manera de temer al cambio, la peor cosa que sucede cuando pierden a un hijo es la sensación inmediata de que todo está patas arriba, y eso es el cambio.  Y eso se traslada a casi cualquier cambio; es un miedo que entra a su propio modo y vive con su género cada vez que están aquí.
Ustedes saben que en los viejos tiempos perder un hijo, incluso al nacer, ¡era muy común!  La tasa de supervivencia podía ser increíble en comparación con la de hoy. Y existía una aflicción para la humanidad en general cuando perdían los hijos por problemas naturales y enfermedades.  Eso se les queda pegado.
¡Pero eso es para todas las mujeres!  Es una de las diferencias entre el hombre y la mujer ante una dificultad, una sorpresa o un cambio.
El otro remanente que viene con ustedes es que sus actividades chamánicas queden expuestas y se las castigue.  Ahora bien; eso lo llevan consigo de forma muy intensa porque hoy en día viven los resultados de eso.  No hay muchas mujeres a las que se pida liderar a la civilización que llaman humanidad. Y ustedes todavía viven con esa cuestión. Entonces cuando hay un cambio, ustedes ven esto también; una doble desventaja, podría decirse.  Los remanentes que llevan en su género son muy fuertes, en comparación con los hombres, y va a serles mucho, mucho más difícil pasar cómodamente este cambio. Algunas de ustedes saben exactamente de qué hablo.
Ustedes tienen una tendencia a pasar sus propias grabaciones durante la noche, cuando duermen; lo que quiero decir con eso es que en su akash, muy, muy profundo, están  las alarmas, y cuando ven un cambio importante, ¡todo lo que pueden hacer es huir de él! La buena noticia es que una vez más el Espíritu lo sabe, y ha habido mucha energía extra puesta aquí en este tiempo para ayudar a tranquilizar el corazón femenino.  Es casi como si los brazos de Dios las rodearan, de una manera que solo ustedes sentirían y conocerían, con esa maravillosa conexión intuitiva que tienen con el Espíritu.  Déjenme decirles que Dios ama a la humanidad, y las mujeres lo sienten primero.  Esa es la belleza de este cambio y esta transformación. Si permiten que el Espíritu las sostenga, lo haremos. Será para el resto de su vida. Es más para las mujeres que para los hombres; ustedes tienen la conexión, la tienen tan fuerte que son las primeras en despertar a todo esto.
Entonces, ¿no tiene sentido que haya algunas herramientas para su género que sean mucho más grandes que lo que esperarían?
Quiero que lo sientan; esta noche durante las ceremonias, durante la música. Quiero que sientan lo especial del amor de Dios en estos tiempos y sepan esto: este cambio es para ustedes. Todas las profecías de las edades dicen que la energía femenina de este planeta - llamémosla la energía de la madre - va a aumentar y se va a sentir, y es una de las cosas que producirá paz en la tierra.  La compasión y el amor que una madre tiene para su hijo será la misma compasión que los humanos tendrán para los humanos.
En este día sean abrazadas.
Y así es.
Kryon
Desgrabación y traducción: M. Cristina Cáffaro