27 noviembre 2024

Infusión Confusión - de la Revista del Círculo Carmesí


Infusión confusión

Geoffrey Hoppe – Revista del Círculo Carmesí

El reciente taller “Explorando la Nueva Luz” en Kona fue para abrir los ojos, y un bocinazo. Adamus les dijo a los asistentes que su vínculo común fue que habían sido maestros en las Nuevas Tierras hasta recientemente. Él siempre inicia los talleres en vivo pidiendo a los asistentes que sientan la energía común que juntó al grupo específico. Esta información brinda el fundamento para muchas de las discusiones y canalizaciones en el taller.

Muchos Shaumbra han enseñado en las Nuevas Tierras durante sus estados nocturnos. Somos veteranos maduros en este planeta, y adecuados para enseñar a entidades que están viniendo aquí por primera vez. Es como el día de orientación en la universidad, o como el sargento de la práctica militar que enfrenta a las tropas en el Centro de Recepción cuando llegan al campo de entrenamiento. ¿Quién sabría mejor que Shaumbra cómo es infundir su esencia en la densidad, quedar atascado, y encontrar la salida sin un mapa?

Adamus lo llevó un paso adelante en el taller. Puso a los asistentes en un juego de roles de su enseñanza en la Nueva Tierra. Un “maestro” se para delante de la clase mientras todos los demás desempeñan el papel de novatos a punto de llegar al planeta. ¡Fue divertidísimo! Aquí va algo de eso:

Maestro: Pronto estarán dirigiéndose al Planeta Tierra, por supuesto por su propia elección. Van a infundir su esencia en la materia y adoptar un cuerpo humano…

Novato 1: ¿Qué es un cuerpo?

Maestro: Su cuerpo estará compuesto de trillones de células y billones de neuronas. Todo estará apretadamente amalgamado en un vehículo de forma extraña que está propenso al dolor, la enfermedad, el envejecimiento y la muerte…

Novato 2: (interrumpiendo) ¿Por qué algún ser angélico se sometería a eso?

Maestro: (después de pensarlo un poco): Bueno, hay cosas buenas en el cuerpo humano, por ejemplo pueden comer buenas comidas…

Novato 3. ¿Qué es una comida?

Maestro: Es cuando comen partes sabrosas de su realidad.

Novato 3: ¿Eso es todo? ¿Es por eso que vamos a ir a la Tierra?

Maestro: Una de las mejores cosas de la Tierra es que pueden hacer el amor a otro humano…

Novato 4: ¿Qué es hacer el amor?

Maestro (algo exasperado): Lo llamamos sexo. Es cuando presionas tu cuerpo contra otro humano.

Novato 5: Ahhh. ¿y cuál es el punto?

Maestro: Se siente bueno. Los humanos tienen dos o tres orificios primarios. Uno es para comer. Se llama agujero del pastel. La especie femenina tiene otro orificio para tener sexo y hacer bebés. Así es como ustedes van a entrar al reino terrenal.

Novato 6: Entonces ¿el agujero del sexo es como nos infundimos en nuestros cuerpos en la Tierra?

Maestro: (turbado) No, no se infunde entrando allí, sino que la especie masculina lo hace  a su manera de infundir, y luego un bebé sale 9 meses más tarde. Ustedes se infunden dentro del bebé cuando sale por el agujero del sexo. Su cuerpo al principio es muy pequeño, y luego crece en tamaño a medida que van comiendo comidas por su agujero del pastel.

Novato 7: ¿Entonces la clave es comer por ese agujero?

Maestro: Bueno, hasta cierto punto. Si comen demasiado se vuelven gordos…

Novato 7: ¿Qué es gordo?

Maestro: Es cuando sus ropas ya no les van…

Novato 8: ¿Qué son las ropas?

Maestro: (totalmente irritado): Es con eso que se cubren para que nadie pueda ver sus agujeros inferiores. Ah, clase, oigo que suena el timbre…

Novato 9: Entonces, maestro, ¿el punto de ir a la Tierra es estar en los agujeros?

Maestro: (saliendo) Ahhh, algo parecido. Hablaremos más de eso entre una y otra de sus vidas. ¡Adiós ahora!

Unos cuatro Shaumbra desempeñaron el rol de maestro durante la sesión teatral. A cada uno le costaba después de las primeras pocas preguntas de los estudiantes de la Nueva Tierra. Imaginen tratar de contestar preguntas sobre el amor, el dinero, los trabajos, el matrimonio, las religiones, el crimen, etc. a entidades que nunca han estado aquí. Algunos Shaumbra hábiles debieran crear un juego de tablero llamado “Responder a los Novatos”. La meta sería ver cuánto duran al frente de su clase de la Nueva Tierra.

Pero aparte del humor de enseñar a los novatos sobre la infusión, probablemente sea uno de los temas más importantes en estos días para Shaumbra.  Y uno de los más confusos. Hemos aprendido cómo infundir la consciencia dentro de la materia densa. De acuerdo a Adamus, eso no fue tarea pequeña. Los humanos son una de las pocas especies que alguna vez lograron esto. La mayoría de los otros reinos son no-físicos. Ellos no se han sumergido tan profundamente dentro de su luz/imaginación como nosotros. Ellos pueden ser Maestros de Luz por derecho propio, sabiendo cómo navegar el océano de las ondas de luz, pero nosotros nos zambullimos y fuimos hasta el fondo.

 Como humanos, aprendimos a infundir nuestra consciencia fuera del Yo Soy. Fuimos a las profundidades de nuestra imaginación o, como dijo Tobías, ingeniosamente creamos el cuadro y luego nos zambullimos dentro, en lugar de solo admirarlo desde afuera. Somos infusores. No es extraño que Adamus diga que los humanos son los seres más grandiosos en toda la creación.

Algunas entidades podrían señalarnos con sus dedos angélicos notando que nos atascamos o nos perdimos, pero ¿realmente lo hicimos? De hecho, solo queríamos completar el círculo. Nos infundimos en la materia, experimentamos una multitud de historias en ella, y luego con las simples palabras mágicas “NO, ya no más” nos permitimos desactivarlo. Es como el buzo que va a lo profundo del mar y regresa naturalmente a la superficie, lleno con las riquezas de su zambullida. Ahora sabemos que podemos infundirnos dentro de… cualquier cosa.

A medida que la nueva especie humana nace durante este tiempo épico del Apocalipsis, ya no estamos limitados a la infusión biológica. O mejor aún, todavía podemos infundirnos en la biología si y cuando queremos, sin la confusión de pensar que solo somos cuerpo y mente, sino que también podemos llevar nuestra consciencia a (llenar espacio en blanco). Lo que sea que podamos imaginar, en eso podemos infundirnos.

Ha sido un viaje tremendo, pero a medida que se disipa la niebla y se levanta la confusión, podemos empezar a llamarnos Maestros Creadores.

Novato 9:  Maestro, ¿cuál es su consejo final para nosotros, los novatos que van a la Tierra?

Maestro: Siempre tengan a mano un conjunto limpio de ropa interior y un sentido del humor. Van a necesitar ambos, todos y cada uno de sus días.

Autor

  Geoffrey Hoppe

              Geoffrey Hoppe fundó el Círculo Carmesí en 1999 después de una serie de conversaciones con el ser angélico conocido como Tobías. Él dejo el mundo empresarial en 2001 para dedicar todo su tiempo al Círculo Carmesí, junto con su esposa Linda. Geoff canalizó a Tobías hasta 2009, cuando Tobías regresó a la Tierra en una nueva encarnación conocida como Sam. Tobías entregó su papel de guía en el Círculo Carmesí a Adamus Saint Germain, de hecho, el Bienamado Saint Germain que ha estado trabajando con los humanos durante cientos de años. Geoff ha sido el mensajero de Adamus Saint Germain desde entonces.

Traducción: M. Cristina Cáffaro