28 agosto 2024

Kryon - Miércoles de Sanación 17 de julio

 Canalización de Kryon por Lee Carroll

Miércoles de Sanación 17 de julio de 2024

¿Es Posible que Dios Interfiera con el Libre Albedrío?

Saludos, queridos, Yo soy Kryon del Servicio Magnético.

¿Es posible que Dios interfiera con el libre albedrío? Aquí está la respuesta: “Bueno, por supuesto que no”. “Bueno, tal vez”. Ah, ok. (se ríe) Tengo que explicar esto. Y quiero hacerlo. Quiero que todos ustedes sepan cómo funciona esto.

Comencemos con la premisa, la que les enseñan a muchos de ustedes, que muchos de ustedes no entienden. En todo el mundo es conocido, y visto, y enseñado, que Dios es amor. Déjenme ir adelante. El Creador del Universo, que hizo tu alma, esa alma que ha estado aquí en este universo, tanto tiempo como Dios, podrían decir que su alma fue creada en el mismo comienzo del comienzo, ese eres tú, cualquiera sea el nombre que lleve esa alma, es amada sin medida.

Mientras te sientas a escuchar este mensaje, Dios está enamorado de ti. Cambia el nombre “Dios” si lo deseas, si te molesta, por “Espíritu”, “Fuente Creadora”, o la Fuente, lo que sea, eso es Dios.  Es Dios para la población del planeta

¿Cuál es la única cosa que casi todas las religiones organizadas tienen en común en lo que se refiere a eso que es Dios? Y si lo piensas, sería esto:  Dios es amor. Dios es grande. Dios está más allá de cualquier cosa que puedas pensar, es amor. Dios te ama.

Y este ha sido el tema, en estos años, que ahora está establecido en un Dios monoteísta en el planeta, un Dios, qué es ese Dios: es amor. Y se te ha enseñado eso. No necesitas ser metafísico para haber oído eso. No necesitas tener un sistema de creencia esotérico que esté fuera de la caja de la religión, para saber eso. Entonces, directamente, te digo esto: Dios es amor.

Entonces, entras en este planeta, con libre albedrío. Queridos, ustedes realmente tienen libre albedrío.

¿Dios te dejará solo, mientras tienes libre albedrío? Mmmm. Algo así. (se ríe). Déjenme preguntarles algo: digamos que tienes un hijo, y este niño crece, y tú pasas por el velo, como su padre o madre. Pero de algún modo eres capaz de visitar a ese hijo. A medida que ese hijo va por su vida, pasa por pruebas y problemas, y relaciones, y todas las cosas que los humanos atraviesan. Pero en este caso particular, tú, como padre, has sido asignado a ese hijo como su guía. Pero él no puede verte. Pero tú puedes verlo claramente.

Pero como ser angélico que eres, con ese hijo, su guía, tienes la capacidad para hacer algo llamado “hacerte mirar”. Hacerte mirar. Qué tal si pudieras abrir un cajón en su cuarto, que nunca se abrió antes, un cajón que tiene una imagen tuya en él. ¿Él lo notaría? Luego se levantaría y cerraría ese cajón, y la semana siguiente lo abriría otra vez. (se ríe). Se levanta y cierra esa puerta. La semana siguiente podría levantarse y abrirla otra vez. Solo para decir: “te amo. Recuérdame.  Estoy aquí. Te amo tanto que estoy sentado a tu lado. Me gustaría que tomes mi mano de nuevo, déjame guiarte”. Con libre albedrío, ese hijo podría entenderlo.  El hijo podría darse cuenta de que el cajón sigue abriéndose solo, “El cajón con la foto de mi mamá sigue abriéndose por sí solo, esa es Mamá, esa es Mamá”. El hijo puede caer de rodillas y decir “Gracias, Mamá, sé que estás aquí, ¡gracias, gracias! Gracias.” Pregunta: ¿tú has interferido con el libre albedrío? ¿O le diste al hijo algo que mirar, donde él decidió que estabas allí? Esto es el “hacerte mirar”

Ahora bien, la interferencia no es de Dios; es de los hombres, que dicen que cualquier cosa inusual que suceda, es maligna. Debe haber un fantasma que hizo eso; date cuenta, tenle miedo. Llama al exorcista, haz algo. Porque cualquier cosa que no entiendes, que podría posiblemente ser multidimensional, tiene que ser del diablo. Esto es lo que te enseñan, es lo que la humanidad está atemorizada de lo que es raro, inusual.

Esa es la pelea, podrías decir, entre la oscuridad y la luz, en lo que se refiere a Dios llamando tu atención.

Queridos, cuando yo me presenté a mi socio, hace 35 años, este fue el caso. Tres años antes de eso, hace casi 40 años, yo presenté a mi socio, el ingeniero, un enigma. El comienzo de un rompecabezas. Con libre albedrío, él fue a un canalizador, que le dio información, y él la desechó, y se rió de eso, y para él no fue nada. Tres años después, con libre albedrío, él fue a un psíquico, que le dijo exactamente la misma cosa. Y entonces empezó a pensar en el asunto. ¿Cómo podían dos hombres, de edades diferentes por 40 años, que no vivían en la misma área, no se conocían entre sí, no tenían nada que ver uno con el otro, darle el mismo mensaje idéntico sobre una entidad llamada Kryon?  Esto llamó su atención.

Número 1: yo le hice mirar (se ríe). ¿Es posible que esto fuera interferencia? ¿O fue simplemente amor? Tocándolo en el hombro y diciendo: mira aquí.  Te hago mirar, te hago mirar. ¿Qué viene después? ¿Qué vas a hacer, con libre albedrío? ¿Qué vas a hacer tú, ingeniero, con este enigma?

El resto es la historia de Kryon, porque el hombre en la silla, el que les está hablando ahora, preparó una silla y se sentó en ella. Y ese es el momento, con libre albedrío, que, vacilante, él tiró un vellón, como dicen (N.T. por una historia bíblica en que el hombre pide a Dios una señal), puso un desafío, como dicen, y dijo: “Si estás allí, muéstrame”. “Kryon, cualquiera sea tu nombre, si estás allí, muéstrame” ¿Qué probabilidades? “Si estás allí, me sentaré en la silla. Vamos. Si no estás, me voy de aquí.” Ese fue el desafío. Eso fue todo lo que se necesitaba.

Y él se sentó en la silla, y yo entré, con todo el amor por su alma, que el nunca realmente había experimentado antes. Desde el otro lado del velo, un amor que siempre estuvo allí, siempre esperándolo. Y lo llené con él. No se requirió mucho, porque él dijo que sí. El daba permiso para lo que sea que sucediera; estaba listo. Y lloró.

Y nosotros todos nos regocijamos, todos los guías. Yo estaba allí. Y cantábamos: Te hicimos mirar, te hicimos mirar. (se ríe) ¿Eso es interferencia? Libre albedrío. Y no lo pudo dejar de lado; se sentía tan bien, ser amado. Y en esos momentos estaba total y completamente en casa; la paz que nunca tuvo antes, solo por un momento.

Se levantó de esa silla muy rápido, dicho de paso. Hubo realmente un poquito de enojo, según recuerdo, porque él no esperaba lo que había sucedido. Él dio permiso, él dijo que si yo estaba allí, que entrara, Y lo hice. Pero  aún así, él no esperaba que sucediera, no realmente. Había un bloqueo subconsciente, porque todo, todos los líderes religiosos le habían dicho: Ten cuidado, va a ser maligno. Y no lo era; eso fue chocante.

Su enojo no era consigo mismo, su enojo no era conmigo, pienso, creo que su enojo era en general, por haber sido tan engañado durante tanto tiempo. Queridos, este es Dios, el Espíritu, la Fuente Creadora, en su apogeo.

Quiero preguntarte: ¿Cuán disponible estás para permitirnos hacerte mirar? ¿Cuán disponible estás para que, tal vez, ocurran sincronicidades que podrían ser imposibles? O cosas que pueden aparecer o desaparecer incluso dimensionalmente, que son imposibles. Y cuando ocurren, hay un tinte de miedo. En cambio, un tinte de alegría. Eso ha sido claro para mí. Mover las cosas de un lado a otro, de una dimensión a otra dimensión. O ¿tienes miedo? ¿Sabes que quiero hablar de eso?  No quieres contarle a nadie sobre eso. Estas son las clases de cosas de “hacerte mirar” que hace alguien que te ama para obtener tu atención, que no puede acercarse a ti y decir “estoy aquí”, porque está contra las reglas del libre albedrío.

Este amor invisible que tenemos, esta invisibilidad de los guías, de los ángeles, incluso del Yo Superior, es parte del enigma del libre albedrío. Pero verdaderamente, la pregunta es ¿Dios interfiere con el libre albedrío? Probablemente todo el tiempo (se ríe). Porque te empujamos con amor, te mostramos cosas que tienes que mirar – o no.  ¿Puedes imaginar cuán triste es para esos ángeles, guías, Yo Superior, estar con un individuo toda su vida, y cuando les muestran sincronicidades, les derraman su amor, entran en sus sueños, y ninguno quiere mirar?  Porque fueron programados para no hacerlo, tempranamente, Les dijeron: no existe, no puede existir, es la mente haciendo trucos, es maligno, es esto, es aquello, en lugar de un Dios amoroso que quiere hacer contacto.

La humanidad empieza a cambiar. Con una consciencia más elevada, un despertar que está ocurriendo, de pensamiento más elevado, de compasión, una de las cosas que viene con todo eso es un grado más alto de disponibilidad para mirar. Hay más ocurriendo con este nuevo humano, podrían decir, que lo que piensan. Un nuevo humano, no como el viejo, no el obstinado, como era mi socio, está en una especie de cultura espiritual que está comenzando en este planeta, que dice: “Yo creo en cosas más elevadas. Está Dios, hay ángeles alrededor; me gustaría verlos; estoy dispuesto a verlos. Miraré.”

Este es el cambio milagroso del Cambio en que están. No estarían mirando este programa si no fuera verdad. De algún modo, de alguna manera, nuestro amor los hizo mirar.

¡Oh! ¡qué mensaje! Ustedes respondieron al amor, y ahora aquí están. Siendo amados, conociendo el amor, Yo soy Kryon; yo conozco el amor. Nosotros estamos enamorados de ustedes.

Y así es.

Kryon.

Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro
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