Serie de la Iluminación Shoud 1
Maestro Adamus Saint Germain canalizado por Geoffrey Hoppe
Presentado al Círculo Carmesí el 7 de octubre de 2023
www.crimsoncircle.com
Merabh de Kamsa (N.T. en
internet: Jamsa)
Tomemos una buena respiración profunda y pongamos algo de música
para nuestra merabh de khamsa. (pausa;
comienza la música)
Khamsa es un símbolo. Se parece a una mano con tres dedos juntos
en el medio. Tiene orígenes antiguos, muy anteriores a su uso por los judíos y
musulmanes, aunque prevalece mucho en el Medio Oriente en estos tiempos.
Nuevamente, no sorprende que estemos teniendo esto como nuestro símbolo para
esta serie. Oh, no lo creamos simplemente ayer; esto estuvo en
preparativos mucho antes de iniciarse
las tensiones actuales. Y en los orígenes de esto hay mucho simbolismo. Cuando
la mano está así (la palma hacia arriba) significa “Yo acepto – yo acepto mi
luz. Yo acepto tomar conciencia de mi luz.”
Significa que te das cuenta de que eres un ser consciente, y que
no estás atado con los hilos de un títere, de los que algún otro ser o incluso
un alma desconocida pueda estar tirando
y moviendo.
“Yo acepto la percepción
conciente de mi luz, de mi ser.” Así de simple.
Y luego, cuando la mano se da vuelta (la palma hacia adentro),
“Yo acepto la sabiduría de mi oscuridad.” Esto no es realmente oscuridad,
después de todo. Son las cosas que no has amado de ti mismo. Es tu naturaleza
crítica respecto a ti. También representa lo desconocido.
Lo desconocido está a veces lleno de miedo, pero “yo acepto la
sabiduría de mi oscuridad” porque en ella hay sabiduría. Todo lo que has
atravesado alguna vez, ya sea en los reinos angélicos o aquí en la Tierra,
eventualmente será transmutado en sabiduría.
Últimamente, no hay oscuridad. No puede haberla. Puede haber
ojos que estén cerrados. Puede haber miedo a lo desconocido, pero últimamente
no oscuridad.
“Yo acepto la sabiduría
de mi oscuridad.”
Así, desde aquí, (la palma hacia afuera) “Yo acepto la
percepción conciente de mi luz, del Yo Existo, Yo Soy” (dar vuelta la palma hacia
adentro) “Yo acepto la sabiduría de mi oscuridad.”
Y luego una mano así, con la palma hacia arriba, “Yo acepto – Yo
acepto y recibo mis alegrías, mi verdadera naturaleza, mi alegría de estar en
la forma humana. Yo acepto eso”.
Entonces es así para la luz (palma hacia afuera), así para lo
oscuro (palma hacia adentro) y así para recibir (palma hacia arriba.)
Tomen una buena respiración profunda. Hagámoslo juntos.
Es muy simple, es como simbólico. Tiene orígenes antiguos, pero
muy apropiado ahora mismo. Ahora ustedes no empujan hacia atrás. Están
aceptando esa luz. Concientes de su naturaleza divina, de dónde han venido,
mucho antes de tomar la forma humana.
Concientes de su propio espíritu santo, de su divinidad. Tomen una buena
respiración profunda y siéntanla. Y sí, yo sugiero que sostengan su mano hacia
arriba para un impacto máximo.
“Yo acepto. Yo recibo. Yo
estoy conciente de mi luz. Yo Soy el que Soy.”
(pausa)
Tomen una buena respiración y sientan eso. (pausa).
Es bastante simple. No necesitan trabajar en eso, excepto si
están sosteniendo su mano hacia arriba y es un poco de esfuerzo, pero es muy
simple.
Y luego, “Yo acepto la sabiduría de mi oscuridad.”
Eso es un poco más difícil, porque aquí hay, oh, cosas que
ustedes no aman de sí mismos – sus errores, sus miedos, el miedo a que su
oscuridad sea más fuerte que su luz. Nah. Son cosas que todavía no han recibido
luz. Pero cuando la reciban, pasarán a ser sabiduría.
“Yo acepto la sabiduría
de mi oscuridad.”
Esto es probablemente lo más difícil. Todavía hay un deseo de
mirarte a ti mismo como malo, o como habiendo hecho cosas terribles. Pero es
simple: “Yo acepto la sabiduría de mi oscuridad,” y es como catapultarte hacia
el futuro, cuando finalmente lo captas y te das cuenta de que nunca hubo
realmente oscuridad. Era solo lo desconocido y los juicios.
Y ahora la cosa grande importante aquí: Justo aquí: “Yo acepto
mi merecimiento como humano.” (N.T.
valía, dignidad) “Yo acepto mi merecimiento como humano. Y por lo tanto
puedo aceptar la alegría y la abundancia.”
No significa que cada día vaya a ser perfecto. No. Todavía estás aquí en
el planeta. Todavía estás rodeado por la
consciencia masiva. Pero al menos en tu propia realidad de ti mismo, puedes
aceptar la alegría.
Está todo justo allí. Realmente me estoy irritando un poco
porque a algunos de ustedes les tome tanto tiempo aceptarlo, que tengan
resistencia. Supérenlo ahora.
“Yo acepto – Yo acepto mi
merecimiento.”
Tú eres el único que puede hacerlo. Podemos pararnos a tu lado
todo el día, pero – esto es terminante. Esto no es un compromiso ni una
negociación, ni una aceptación por grado. Es la aceptación de tu merecimiento.
Ustedes han recorrido un largo camino en permitir la abundancia,
sin sentir eso, esa vieja culpa perpetua y sufrimiento. Pero todavía están
vacilando. Es hora ya mismo. “Yo acepto que yo soy digno”. Eso es todo.
Y luego, lo que sucede con Khamsa es que entras en este flujo.
Difícil de definir, difícil de explicar a otros, pero de pronto estás en tu
propio flujo. Y nuevamente, el significado de Khamsa es “No necesito tomar
todas esas decisiones humanas. No necesito tramar y planear todo en mi vida. No
tengo que ponerme mi traje de armadura cada mañana para salir al mundo. No
tengo que preocuparme de dónde vendrán las cosas, cómo llegarán a mí. No
necesito salir de caza todos los días por una canasta de energía. No tengo que
preocuparme por mi cuerpo físico. Yo sé que moriré algún día, pero no del
antiguo modo de la enfermedad.”
Es Khamsa. Pura gracia. Pura gracia.
Ahora estás en el flujo.
Las cosas irán llegando, sí. Absolutamente. Días malos, pero no
son ya tus días malos. Solo estás en medio de los días malos de todos los
demás. Ya sea el tránsito o lo que pueda ser, o malas noticias, o solo la
gravedad de la consciencia masiva, pero tú aún estás en tu flujo.
Tienes la compasión para reconocer lo que está sucediendo a tu
alrededor con otras personas. Tienes la percepción conciente para entender que
están donde ellos eligen estar, y que eso no es para que tú intervengas, a
menos que te pidan ayuda.
Pero ahora que estás en esto, bueno, es mágico. Es un flujo. Es
Física. La Física de la energía ahora (palma hacia afuera con los tres dedos
medios juntos); así (palma hacia afuera) sirviéndote; (palma hacia arriba). Es
realmente física pura.
Es luz, tu luz, llegando a ti ahora sin todos los filtros y sin
todas las limitaciones. Es tu luz pura llegando a ti y luego la devuelves hacia
afuera, de vuelta hacia ti mismo y a toda la creación.
Dos cosas, ahora mismo, mientras estás en el planeta: iluminar,
y disfrutar de tu vida. Bastante simple. Bastante simple. Es un diseño básico
de la energía.
Tomemos juntos una respiración profunda para comenzar nuestra
Serie de la Iluminación.
Mucho está sucediendo en el planeta, y no es tuyo. Pero nos
encantaría que hagas brillar tu luz sobre ello. (pausa)
Lo que sucede aquí es también que al empezar a realmente a captarlo,
al permitir que esa luz ilumine, se vuelve una pasión. Muchos de ustedes están
acostumbrados a una pasión asociada con hacer algo o lograr algo, ya sea un
hobby, o construir algo, o lo que sea.
Este es un tipo de pasión diferente. Pasión de simplemente estar
aquí, estar en un espacio tan seguro, estar en esta gravedad tan densa de la
vida, y permitir que esa luz de tu alma esté aquí y luego iluminar hacia
afuera. Eso es tal vez el sentimiento más grande de todos. Es libertad.
“Puedo hacer brillar mi luz.
Yo soy luz y puedo hacerla brillar.” Eso es libertad increíble.
Tomemos una respiración profunda por todo lo que está sucediendo
en el planeta ahora mismo. Las cosas ciertamente se están disrumpiendo, y hay
cosas que se sacuden, que hacen ruido. Todo se está moviendo.
Con lo que está sucediendo en Medio Oriente; ha estado viniendo
durante largo tiempo. Y sí, yo sé que les hace decir “¿Qué está mal con la
humanidad?” y “¿Por qué estas batallas?” y “Por qué esto?” y tal vez
lamentándose por un bando o el otro. Es una batalla antigua.
Si yo estuviera en la Tierra ahora mismo como humano, me
encantaría hacer brillar mi luz. Me abriría ampliamente, abierto, y simplemente
lo detonaría con luz. Quiero decir, no con una agenda, no tratando de hacer
alguna cosa, sino que diría que es un momento tan increíble y una oportunidad
ahora mismo para ir más allá de este asunto antiguo, muy antiguo de Hapiru (N.T. de Wikipedia, pueblos sumamente
antiguos de Medio Oriente, Habiru, Apiru)
Francamente, estoy cansado de ellos. Realmente lo estoy.
Afortunadamente, las familias espirituales
se han desbandado, pero parece que todavía conservan algo de pegamento.
Realmente me están cansando, y yo sé que en la Nueva Luz, esto simplemente no
será permitido. No estos juegos; no este poder; no este control; y estoy
cansado de las batallas de Dios en el planeta. Realmente estoy cansado. Y las
guerras que ustedes ven ahora están en la misma “zona cero” del control
religioso, las batallas por Dios que están teniendo lugar.
Hagamos brillar nuestra luz hoy, ahora mismo. Hagamos brillar la
luz. Nuevamente: sin tomar por uno u
otro bando. Hagamos que las cosas
evolucionen (pausa).
Entonces, ¿cómo se trae solución, incluso a sus propios
problemas, que parecen haber estado persiguiéndolos largo tiempo, cosas con que
han estado batallando? ¿Cómo traer esa solución?
Primero, se trata de darse cuenta de lo que realmente está
sucediendo. En este caso, las antiguas familias de los Hapiru, su historia, lo
que está sucediendo. No se trata solo de los últimos 50 años o lo que sea. Va
mucho, mucho más atrás. Se trata de darse cuenta de eso.
Luego se trata de soltar la dualidad – un Dios contra otro, una
cultura humana, una religión contra la otra. Se trata de soltar eso, la
dualidad, porque la dualidad es lo que crea la gravedad. La gravedad es lo que
sostiene las cosas unidas. Cuando tienes un asunto antiguo que data de tanto
tiempo atrás, esa gravedad es intensa.
La gravedad dentro de tus propios asuntos y tu propia vida, el
batallar aquí y allá, los aspectos, las vidas pasadas, el cuestionar y dudar,
lo humano versus lo divino, lo humano versus lo humano. Todo está sostenido
junto por la gravedad.
La luz vence a la gravedad. No es ni siquiera un problema. Ni
siquiera es un desafío. La luz simplemente vence a la gravedad.
Abre las cosas. Suelta las cosas en libertad, ya sea las
batallas dentro de ti mismo, las batallas antiguas, las nuevas batallas. Están
sostenidas en su lugar por la gravedad. Cuando más luchas, más se intensifica
la gravedad, y al introducir algo de luz esa gravedad - ¡whhhwww! – se va.
La gravedad es algo que, podrían decir, solidifica una historia.
Quiero decir, le da una base a la historia sobre la cual tener su historia.
En este caso, tenemos una historia enorme que data de muy largo
tiempo, tanto dentro de ustedes como dentro de los Hapiru. Entonces, hacemos
brillar la luz. La gravedad se resistirá, pero se irá.
¿Podrías imaginar la gravedad psíquica, religiosa, mental y
física de Jerusalén disipándose de pronto? Ya no tendrán nada a qué aferrarse.
No pueden sostenerse. Nada con qué luchar. Se va.
Se disuelve, y muchos de ellos quedan haciéndose preguntas.
“¿Qué vamos a hacer ahora? ¿Qué ha pasado aquí? ¿Con quién voy a pelear ahora?” Pero, sabes, es difícil pelear cuando no hay
gravedad que lo sostenga.
La Nueva Luz, trae un nuevo tipo de gravedad, una que no tiene
la densidad. Vamos a hablar sobre eso en el Keahak, en nuestros talleres y
eventualmente en los Shouds. La Nueva Luz no solidifica la gravedad. No la clava
en su lugar. La gravedad fluye libremente.
Es gravedad creativa – gravedad creativa- y cuando haces brillar
tu luz, cuando iluminas, y sale para que todos la contemplen, sale hacia este
lugar en medio Oriente ahora mismo, que está lleno de tanto conflicto, y rompe
la vieja gravedad.
Esto introduce la nueva gravedad creativa. Muy, muy diferente.
La gravedad creativa no va a permitir esta clase de peleas.
La historia está cambiando ante tus mismos ojos en estos días, ahora
mismo. La historia data de hace mucho, mucho, mucho tiempo atrás, antes que la
Tierra fuera creada, en las familias angélicas en los Hapiru. Ya era hora de
que esto termine.
Tomemos una respiración profunda, queridos Shaumbra. Tomemos una
respiración profunda en aceptación de su luz, en aceptación de la sabiduría de
lo que llamarían oscuridad. Y esa misma oscuridad es gravedad que se está
moviendo, cambiando hacia una gravedad creativa.
La gravedad creativa no tiene ninguna oscuridad. No ciega, como
lo hacía la vieja gravedad. Y luego a recibir; su merecimiento para recibir. No
hagan solo los dos primeros. Ustedes son dignos de recibir. Cuanto más reciben,
con más luz iluminan.
Con eso, queridos Shaumbra, tomemos juntos una buena respiración
profunda.
Me gustaría dejar que suene música en este Shoud. Yo estaré
saliendo de aquí en un momento. Me gustaría que ustedes pasaran un breve
momento aquí consigo mismos.
Dos cosas: iluminación, y su alegría en la vida.
Con eso, en nombre de todo el regocijo de los ángeles – oh,
ustedes no saben lo que esto significa para ellos. Esta cosa de los Hapiru ha
sido demasiado larga, y ellos le ven un final. Y se regocijan por todos los que
están listos para iluminar.
Con eso, Yo Soy Adamus de Saint Germain. Gracias.
(Se oye música durante varios minutos)
Gracias. Adamus
