Artículo de José Stevens: Cómo Estabilizarte
School of
Shamanism (Escuela de
Chamanismo) www.thepowerpath.com
Una de las mayores repercusiones de la grandiosa transición que está atravesando la raza humana ahora mismo es la desestabilización. Repasando un poco el contexto aquí, la raza humana atraviesa la transición más grande que haya experimentado en cualquier otro período histórico. Hay varias razones para esto. La raza humana siempre ha estado evolucionando, y continúa su evolución a una velocidad vertiginosa ahora mismo aun cuando muchos están tan disgustados con la actividad y la conducta humana que están convencidos de que la raza humana está realmente en retroceso. Esto puede parecer así, pero es totalmente inexacto. Ahora mismo, la raza humana está pasando por la pubertad, yendo desde la infancia a la adultez, pasando por la etapa transicional de la adolescencia. Cualquiera que haya estado con los adolescentes, y especialmente los delincuentes, también puede estar convencido de que están en retroceso, pero eso obviamente no es así.
La
transición hacia la adultez puede ser muy difícil y en eso estamos, comprimidos
dentro de un período de 50 años. No solo estamos evolucionando en términos de
nuestros logros científicos, tecnológicos y económicos, sino que evolucionamos
en términos de nuestra espiritualidad y consciencia. Sin embargo, no todos
evolucionamos al mismo ritmo, y esto crea una enorme polarización y conflicto
que amenaza con hacer pedazos nuestro mundo. De hecho, no todos los miembros de
la raza humana están evolucionando a través de la pubertad en este momento.
Algunos apenas están yendo desde ser bebés a la niñez temprana, otros desde la
niñez temprana a la infancia, y algunos pasan de la adolescencia a la adultez,
y algunos incluso van desde la adultez a la etapa de maestría. Entonces, lo que
cada uno de nosotros quiere y necesita ahora mismo es muy diferente, y los
cambios que algunos humanos necesitan hacer, amenazan profundamente a otros que
no están listos para hacer esa clase de cambios. En otras palabras, lo que
tenemos es una gran cantidad de caos y desestabilización generalizados.
El
cambio siempre trae desestabilización. Cuando te mudas de una parte de la
ciudad a otra, o desde una ciudad a otra, hay un período de desestabilización y
adaptación. Existe un período de tiempo en que no puedes encontrar tus
pertenencias porque todavía están en cajas, y no sabes dónde están los
comercios, o los mejores caminos para ir a otros lugares. Tus vecinos son todos
gente diferente y hay muchas cosas a las que acostumbrarse. Puede que estés en
un trabajo nuevo; los niños están yendo a escuelas nuevas, y todas las rutinas
de tu familia están perturbadas por cierto tiempo. En una palabra, es un tiempo
de estrés, y estás desestabilizado, probablemente pensando “Solo quiero saltar
seis meses hacia adelante”, o bien “Desearía que esto hubiera terminado.” De modo que la desestabilización viene con
algo de resistencia y ansiedad.
El
tipo de desestabilización en que estamos ahora es más severo que lo que acabo
de describir. La amplitud ha estado creciendo constantemente y la vibración de
todo está cambiando de un día para otro. Tal vez tú experimentas esto como que
nada parece ya familiar. Puede que estés preguntando, “¿Qué país es este?” ¿En
qué mes, o en qué año estamos? ¿Qué estación?
Nada parece ya ser lo mismo. Me siento asustado. Todos mis amigos
parecen más viejos que hace un breve tiempo atrás. ¿Cuánto tiempo ha pasado?
¿Cómo los niños crecieron tanto? ¿Qué edad tengo? ¿Tendré demencia, o qué? No reconozco esta
calle. ¿Dónde diablos estoy? ¿Cómo este país llegó a estar en este estado de
pronto? Esto puede sonar extremo, pero
mucha gente está realmente experimentando esto. Algunos lo atribuyen a haber
tenido Covid, y estar luchando con una niebla mental o algo parecido, pero
incluso quienes no tuvieron Covid están diciendo estas cosas. No puedes
distinguir si esa sensación rara es una indigestión, o si has tomado algo que
está alterando tu consciencia, o si estás por caer en cama con gripe. Al minuto
siguiente te sientes bien, o tal vez incluso grandioso. En un momento estás
ansioso y deprimido, y al siguiente sientes que tu corazón se abrió ampliamente
y amas a todos.
Considera
estas alteraciones como la nueva normalidad. Sí, estás desestabilizado y ese es
el precio que pagas para ser admitido a la siguiente fase de la evolución de la
humanidad. Estamos evolucionando muy rápidamente, y todo se desmorona,
especialmente nuestra cómoda relación con lo que pensamos que es nuestra
realidad. La realidad está siendo sacudida hasta su centro, y esto es solo el
comienzo. ¿Acaso sorprende que muchas almas más jóvenes estén perdiendo el
juicio y tiroteando a todos los que ven? ¿Acaso sorprende que el pueblo esté
eligiendo funcionarios que están claramente mal de la cabeza? ¿Acaso sorprende
que las teorías conspirativas parecen haber secuestrado a la razón equilibrada?
Es el precio de admisión, gente, y es un precio elevado.
¿Cómo
nos estabilizamos? Claramente, lo que mucha gente elige solo la desestabiliza
más aún. Recurrir a la botella puede parecer buena idea para algunos. Correr
por las calles de la ciudad en medio de la noche es otro extraño intento de
estabilizarse. Comprar armas y cargarlas con municiones puede parecerles a
algunos una manera de estabilizarse. Entrar en internet y buscar respuestas en
sitios radicalizados es otro intento. Todos están destinados al fracaso. De
hecho, la mayoría de nuestros intentos para manejarlo externamente está
destinados al fracaso y generalmente solo empeoran el problema.
El
problema es que el ego – nuestra falsa personalidad – nunca ha sido estable.
Está sujeto a los vaivenes de los juicios y opiniones ajenos, a las normas
culturales, a los movimientos políticos, al condicionamiento, a la programación
y al lavado de cerebro. Allí no hay estabilidad. Al final, no puede ni siquiera
lavar su propio traste (nota de humor).
Solo sabe cómo comparar, juzgar, lloriquear, quejarse, culpar, y otras pocas
maneras desabridas de ser. Al final, ya sea que tu falso yo te haga usar un
traje formal y beber vinos finos, o vestirte con los harapos de alguien sin
techo, no ofrece ninguna promesa duradera de algo más que la desdicha.
Tu
percepción conciente de tu propia presencia, tu percepción conciente de tu
propio ser, tu propia consciencia, es lo único que es estable en última
instancia. ¿Por qué? Porque por definición, nunca cambia. Siempre, siempre está
presente y observando tu vida tal como es. Tu consciencia es absolutamente
neutral, pero no es fría e indiferente. Es la única cosa dentro de ti que ama,
que es conocida por el amor, que sabe, sin tener que pensar. Simplemente es,
siendo ahora, sin preocuparse por el tiempo, el lugar, o el movimiento. La
percepción conciente dentro de ti nunca se va a ningún lado, nunca se fue a
ningún lado en toda tu vida, no importa cuán rápido corrías o conducías un
coche. Incluso si estabas a la carrera para llegar al trabajo, o a casa al
final del día, está completamente quieta, no tiene agenda, y no le importa. Es
el espíritu, conociéndote como eres y reconociéndote como parte de sí mismo.
Esa es la definición de estable, y eso siempre ha sido así y siempre será así.
En
estos tiempos de desestabilización máxima, este es tu único puerto real en una
tormenta. Incluso tus parejas, amigos y familiares confiables, en este momento
están pasando por su propia desestabilización y no se puede contar con ellos
completamente como personas cuerdas de un momento a otro.
Las
cosas más estables en el universo no son objetos, porque los objetos están
sujetos a la desestabilización. Tu percepción conciente, tu ser, no es un
objeto. El grado en que tú te identificas como objeto es el grado en que eres
inestable. Esto no es un ancla óptima para tener. Un ancla mucho mejor es tu
ser, porque tu ser realmente no es tuyo sino que pertenece al Espíritu y el
Espíritu es la mejor ancla posible que puedas tener.
Por
lo tanto, la cordura reside dentro de ti, aquí mismo, ahora mismo. Eres
realmente estable en tu percepción conciente y en tu presencia, pero tal vez no
has buscado allí todavía. Siempre has sido estable, siempre serás estable, más
allá de la muerte y el renacimiento. Tu cordura es gratuita, no te cuesta nada
más que tu atención. Es como una gran jarra de agua justo frente a ti cuando
estás desesperado de sed, y buscando en todas partes algo que beber.
© Todos los derechos reservados para www.thepowerpath.com
Puedes hacer copia de este escrito y distribuirlo en cualquier
medio que desees, en tanto no cobres por él ni lo alteres de ningún modo. Debes
dar crédito al autor e incluir toda esta nota de copyright. En tanto el texto
puede compartirse, no se pueden publicar audios, conferencias, música o
meditaciones de sonido sin autorización escrita de Power Path.