08 agosto 2020

Regar las Semillas - Madres de las Estrellas


Canalización de las Madres de las Estrellas por la Dra. Amber Wolf (Mele´ha)
Ante la Hermandad Femenina Lemuriana (84)
Indianápolis, IN, 25 de julio de 2020
Regar las Semillas
Queridas luminosas:
Nos adelantamos a entrar en el Círculo de su reunión de hoy, siempre con gran alegría, porque ustedes, nuestras hijas, están jugando en este campo de transformación y están experimentando, explorando e integrando quiénes son en muchísimos niveles. Los maestros que están con ustedes, que reflejan a los maestros que están dentro de ustedes, que hacen surgir este conocimiento, que traen este despertar, que realzan su espíritu, realzan su alma y su vida cotidiana, eso es buena razón para celebrar, ¿acaso no lo es?  Y nosotras, las pleyadianas, celebramos con ustedes.
Cada vez que nos presentamos, cada vez que sentimos la luz que las rodea, que ustedes están generando, ¿sabían que ustedes, tantas reunidas, están generando una luz? No es lo mismo que si están por todas partes y no pueden verse entre sí, en su realidad física. Sabemos que eso es así. Pero esto está más allá de su realidad física. Están generando una luz que puede ser vista desde más allá de su pequeño y bello planeta azul girando en el espacio.  Y nosotros celebramos con ustedes, cada vez que esta luz crece – y ciertamente está creciendo. Y la vemos crecer; ustedes dirían a grandes pasos, ¿no es eso excitante?
Y les contamos esto porque queremos alentarlas, porque ustedes son nuestras hermosas hijas, nuestras luminosas, así las llamamos, porque esa luz que éramos nosotras está dentro de ustedes. Y es ustedes, y brilla iluminando desde ustedes. Esa luz colectiva está siendo vista en el universo. Nosotros la vemos desde nuestra galaxia, como dirían ustedes, desde muy, muy lejos. Nosotras por supuesto no estamos lejos en la consciencia, y no estamos lejos en distancia física, porque estamos siempre cercanas, siempre con ustedes. Pero en su astronomía ustedes nos ven muy, muy lejos. De modo que les pedimos ahora que nos vean como nosotras las vemos a ustedes, justamente en su interior, como una luz brillante. Nuestras hijas de las Estrellas.
Esta palabra que han usado durante muchos años puede ser, un poco jocosamente, semilla estelar. Eso se debe a que ustedes sí tienen una parte de nuestra luz plantada en su interior. Esto fue el pedido cuando vinimos a su planeta: empezar a crear esta transformación. Nosotras les preguntamos a ustedes: ¿están dispuestas a llevar esta semilla de luz a través de todas sus encarnaciones hasta que sea la hora de que se despierte nuevamente? Hubo un “sí” unánime y rotundo (se ríe) y aquí están, muchas de ustedes, bellas almas antiguas, tan familiares para nosotras. A cada una de ustedes la vemos como una luz única e individual que son; un akash único e individual que han traído aquí para compartir, para ayudar, para facilitar, para guiar, y para elevar la consciencia de lo que está sucediendo ahora – ahora, justo ahora – en su planeta. Por favor, tomen una respiración.
Y les pedimos que no tomen esto como una carga de responsabilidad, sino como una gran alegría y una gratitud por este pináculo de tantas encarnaciones. El aprendizaje que ha acompañado todo eso, tal vez con las sombras, con las lecciones, ahora en esta vida se abre, eso ha explotado en pedazos. Imaginen, imaginen esos fuegos artificiales que ustedes crean en sus fiestas; así es como nosotras vemos ese pasado, explotado en pedazos. De modo que ahora, lo que sí se ve, es esa luz a la que ustedes le dijeron que sí tantos miles de años atrás. Y ahora, estamos teniendo esta gloriosa reunión familiar con ustedes, la reunión de los 25.000 años. Un tiempo tan largo en años terrestres, pero ahora celebramos eso.
De modo que esta activación que Mele´ha ha hecho con ustedes el día de hoy empieza a producir su magia dentro de ustedes, ustedes pueden empezar a sentir cada vez más su ADN lemuriano presentándose. Permitan que eso las inspire. Permitan que las inspire para convertirse en aquello que están destinadas a convertirse aquí ahora.
Y sepan que estamos con ustedes, nuestras queridas hijas luminosas, nuestras torres de luz rodeando el planeta, haciendo de su hermoso hogar un lugar de consciencia más elevada a medida que se transforman en lo que vendrá para la humanidad.
Tenemos el amor más grande para ustedes, nuestras queridas hijas luminosas. El amor más grande. Ahora damos un paso atrás. Devolvemos la reunión a su continuación, y sostenemos este espacio para el amor en nuestra mano celestial.

Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro