Conferencia de Ciencia y Espiritualidad – Ottawa,
12 a 19 de Junio de 2020
Canalización de Kryon por Lee Carroll
2 – La Verdad Central
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Muchos siguen preguntando: ¿Quién es Kryon? ¿Qué es
Kryon? ¿De dónde vienes, Kryon? La mejor respuesta que puedo dar a través de mi
socio en este momento sería decir: energía hermosa, alerta, compasiva,
benévola, de la Fuente Creadora. Ustedes pueden llamarla angélica porque eso es
lo que les enseñaron que la representaría. Pero el ángel siempre está separado
de ustedes, ¿no es así? El ángel siempre viene del cielo, y ustedes caen de
nariz. Pero esto es diferente. Y de eso quiero hablar.
En estos pocos momentos otra vez voy a abordar este
asunto de la Fuente Creadora; qué es lo que está dentro de ustedes. Antes de
empezar, pido; si han llegado a este lugar y están mirando o escuchando,
probablemente lo han hecho con propósito. Incluso aquellos que tal vez han
llegado aquí por otra persona y solo están mirando para ver qué hace ese tipo raro
que canaliza, incluso tú; si quieren sacar algo de este mensaje ahora, además
de un examen intelectual, ¿por qué no visualizan algo conmigo? Hay muchos en
este planeta ahora mismo, tal vez incluso tú, que estén de un humor ansioso,
tal vez temeroso, preocupado, no saben exactamente qué vendrá después, no saben
exactamente qué les traerá el sistema, cuán rápida será la recuperación, cuán
pronto se verá, si la quieres tomar, si estará allí o no, todas estas cosas se
desconocen. Están en una posición que realmente se ha descripto; qué vendrá;
decisiones que deben tomar las masas, todas juntas en algún punto del tiempo. Muchos
leerán mis palabras del pasado sobre quienes dejan el planeta masivamente y
dicen “Tiene que haber una guerra, ¡tiene que haber una guerra!” Bienvenidos a la guerra; no lo es. Pero ha
puesto al planeta de rodillas, todo mirando a la misma cosa: ¿qué viene
después? ¿Qué haremos? Un tiempo de reflexión que va a crear soluciones, y van
a ser soluciones en muchas áreas. Empiezas por arriba: soluciones para ti.
Soluciones para una de las preguntas candentes que podrías tener: ¿cuál es tu
relación con la Fuente Creadora?
Esto es lo que te voy a pedir que hagas. Quiero que tomes
por, ejemplo, todas esas preocupaciones, esas cuestiones que te mantienen sin
dormir durante la noche – yo sé quién está mirando – y que las empaquetes en un
bulto, un bulto físico que puedas visualizar. Y ahora las pones a un lado.
Todos ustedes. Esos bultos son todas las cosas que los preocupan, incluyendo lo
que está en el futuro, la cosa siguiente, los ¿qué pasa si...? Los empaquetas
en un bulto bien atado, y luego en tu mente quiero que saques ese bulto fuera
de tu casa; no adentro, donde vives, sino afuera. Lo puedes poner afuera en
cualquier lugar, no necesita ser el contenedor de basura, (se ríe), o puede ser el jardín, cualquier lugar donde quieras
ponerlo. Visualizas todas esas cosas, y vas a hacerle una promesa a ese bulto.
La promesa es esta. Es solo temporaria, si lo deseas así. “Por los próximos
momentos quiero no tener ese paquete en mi casa, ni cerca de mí, ni en mi
consciencia, sino allá afuera.” Y la promesa que le haces al paquete es que te
ocuparás de él más tarde, porque ese paquete va a patear y gritar. Les digo eso
ahora mismo, es parte de él. Va a decir “Sí, pero... Esto es mi intelecto, y es
lo que me permite planear el futuro”. Quiero que lo tomes y lo empaquetes y lo
pongas afuera durante los próximos quince minutos. Eso es todo. Quince minutos.
Al fin de los quince minutos puedes ir a buscarlo – en tu mente. Lo buscas y te lo pones de vuelta encima, de
modo que puedes seguir temiendo y preocupándote con todas las ansiedades que
tienes; si lo deseas. ¡Es tu elección, querido! Eres tú. Empaquétalo ahora, ya
mismo; ponlo a un lado.
Algunos van a decir “Si empaqueto todo eso, ¿qué me
queda?” De eso vamos a hablar (se ríe).
¿Qué queda? En este punto del tiempo lo que queda es una pieza que empieza a
pensar de manera más clara sobre lo que podría estar sucediéndote ahora mismo.
¿Qué es? El día 13 de este mes, mi socio presentó algo llamado “May you look”. Fue una presentación de casi una hora de un
concepto muy poco familiar: ¿Cuánto te ama Dios? ¿Está la Fuente Creadora – que puedes llamar
Dios, o Espíritu – está la Fuente Creadora allí, sabiendo tu nombre, interesada
en ti, o no? ¿Es un poder en el cielo? ¿O es algo más grande y más personal? Y en ese momento él dio una metáfora que yo le
había dado antes, que incluso la había dado en canalización, y la metáfora es
así. Dos padres, en otro tipo de mundo, tienen hijos. Esos dos están realmente
aliados como uno solo, los llamaremos la Fuente Creadora a los padres de estos
hijos. Y cuando los niños llegan a cierta edad, muy jóvenes, son llevados a
otra dimensión y entre las dimensiones hay un velo. Y los niños tienen libre
elección. Y la libre elección es esta: encuentren a sus padres – o no. ¿Están
entendiendo esto? Esta es la configuración, queridos, y esa relación entre
ustedes y sus hijos, y el amor que hay allí, es un espejo de la relación entre
la Fuente Creadora y el alma de ustedes. Con libre albedrío se les permite buscar
al Creador a su manera. Según la manera de mi socio, él presentó momentos en su
vida en que nosotros podíamos pinchar el velo para dejarlo mirar. Pincharlo
hacia una realización de que podía haber algo más grande; incluso antes de que
Kryon llegara a su vida. Le ocurrieron cosas. Dijo “ojalá mires” (may you look). Contará más historias de
esas, seguro.
Y en el proceso ¿ven lo que está sucediendo? Por ejemplo,
padres observando a sus hijos en otra dimensión tener una oportunidad ¡de vez
en cuando! Poder hacer que miren; decir “estamos aquí, si quieres. Estamos
aquí, si quieres. Estamos aquí, si
quieres.” Eso es lo que está sucediendo justo ahora.
Con ese paquete allí afuera, quiero hacerles algunas
preguntas. ¿Es Dios, la Fuente Creadora del Universo, algo más que un poder en
el cielo? Les diré la verdad; es la verdad más grande del planeta. Es la verdad
central de todas las cosas; es una verdad que es el comienzo y el final; es una
verdad que está más allá de todas las otras verdades.
Y esta es la
verdad. La Fuente Creadora de todas las cosas, incluyendo esta galaxia, y toda
la vida en ella, tu Tierra, y tu alma misma, te ama, conoce tu nombre, tú le
importas, tiene acción benévola para ti y tiene su mano, su brazo, extendido a
cada momento del día. Te ama sin medida. Punto.
Y esto contradice casi toda la lógica del planeta. Dicen,
“Sí, pero aquí y aquí, y cuál es el significado intelectual de eso, y cómo
funciona, y qué puedo hacer...” ¿Qué tal si te relajas por un momento? Y piensa
en estas cosas: ¿a Dios le importa? ¿Al Espíritu le importa? ¿Cómo lo sabrías?
Te he dicho antes que hay axiomas de verdad que tienen que ver con la acción,
con la acción compasiva. ¿Cuánto te importan los que están contigo? No estoy
hablando de tu familia; hablo de los que están contigo en el planeta. ¿Cuánto
te importan? ¿Cuánto te importa lo que está sucediendo ahora mismo a los que
sufren? O han perdido seres queridos. ¿Cuánto te importa? Hay algunos que dirán “Me importan mucho”.
Pero te diré que están los que se sientan a esperar que Dios cuide de ellos. Y
dicen, "no hay ninguna evidencia de que Dios cuide de mí; he estado aquí
sentado esperando un mensaje de su cuidado durante largo tiempo” sin entender
que parte de este proceso es un Dios reflejado en tu vida. ¿Cuánto te importa a
ti? Cuando a ti te empieza a importar, de pronto empiezas a sentir ese cuidado.
Eso es un axioma; llámalo un sistema, llámalo una regla, si lo deseas. Y tiene
que ver con una relación que estás aprendiendo entre la Fuente Creadora y
tú. Cuanto más capaz seas de hacer las
cosas que esperas que Dios haga por ti, más te acercas a una grandiosa verdad.
¿Cuánto le importas a Dios?
¿Hay comunicación posible con el Espíritu? Algunos dicen
“He esperado largo tiempo para que te comuniques conmigo. ¿Dónde está el
pinche? ¡Quiero el pinchazo!” ¿Cuánto has intentado comunicarte de manera
benévola con los que te rodean? ¿Cuánta compasión has sido capaz de generar,
que es divina, por los que te rodean?
¿Has sido difícil? O te has relajado y has dicho: “Querido Espíritu:
lléname de entendimiento y conocimiento que pueda realmente suavizar el lugar,”
ahora mismo, por ejemplo, con ese paquete allá afuera es buen momento para
pedir eso. ¿Dios es real? Hemos hablado
antes de qué ahuyenta la experiencia del amor del Espíritu. Si siguen la
metáfora que les di, de los padres que están del otro lado del velo, eso es el
Espíritu, eso es el Dios, ¿qué tienen que les interese? ¿Han pensado en eso?
“¿Por qué yo? ¿Por qué al Creador le voy a importar yo? ¿Por qué?” Y aquí es
donde se pone bueno. Porque casi todos los sistemas espirituales del planeta
creen en la vida después de la muerte. Eso significa que tienes un alma. No
definas “alma”; ni siquiera intentes definir el alma, porque vas a estar fuera
de la base; tan fuera de la base que lo definirás intelectualmente, incluso
espiritualmente, y te equivocarás. No tienes idea. Un vehículo
multidimensional, si quieres llamarlo así, algo en que montas en el planeta, si
quieres decirlo así. ¿Y qué es? Esta alma tuya es una parte del Creador. Tus
hijos tienen tus atributos; una parte de ti está en ellos, y lo sabes. Lo
puedes ver en su plantilla, lo ves en el engrama de su pensamiento. ¿Cuántos de
ustedes que son padres se han dado cuenta de que tienen hijos que ahora siguen
las cosas que a ustedes les gustan, no porque ustedes se lo indicaron? Es
natural; O se parecen a ustedes. Porque lo que ustedes les dieron está en su
ADN. ¿Alguna vez oyeron la frase “hecho a su imagen”? Eso no significa que ustedes tienen el
aspecto de Dios, queridos; la imagen a la que fueron hechos ¡es el amor! ¡La
compasión! ¡El cuidado! ¡La benevolencia! Esa es la imagen.
Y está todo allí,
no tienes que buscarlo. Si pones el paquete afuera, permitirás que eso aflore. ¿Qué
es ese paquete? Oh, oh, hablaré de eso en un momento. Tu alma es parte de la
Fuente Creadora, así como tú eres parte del ADN de tus padres. Tienes atributos
del Creador en ti; Dios dentro de ti. ¿Cuántas veces has oído esto? ¡Eso es lo
que tienes! ¡Por supuesto que el Creador tiene su brazo extendido, tal como tú
lo harías si tus hijos estuvieran en otra dimensión, dirías, “Eh, eh, miren;
sientan el amor, podemos ayudarlos, les podemos avisar de los pozos que están
adelante, podemos guiarlos por la intuición, hijos, hijo.” Y a menudo los hijos
dirán “Ni siquiera lo creo, no hay pruebas, no puedo verlo, por lo tanto no
existe. De modo que me iré por mi cuenta.” No mejora las cosas, ¿no es así?
Estás creando un pequeño paquete que pones afuera, lo llamamos miedo. El
opuesto del amor, queridos, no es el odio; es el miedo. El miedo borra el amor,
completamente, totalmente. Lo mismo hace la ansiedad; totalmente. Si tienes
esos dos atributos de manera regular, por supuesto que no vas a creer que hay
Dios. Te lo van a decir, pero no lo vas a creer. Porque tienes miedo. Estas dos
cosas de por sí, miedo y ansiedad, están entre las cosas más grandes que
ahuyentarán tu posibilidad de ver un Dios que te cuida. Tienes la capacidad
como ser humano de empacar los dos y ponerlos en otro lugar, tal vez afuera.
Ese es uno de los atributos de que hemos estado hablando,
y los que trabajan en esta área han estado hablando durante años; la capacidad
de tomar el miedo y la ansiedad y convertirlos, reestructurarlos hacia algo que
no sea primordial, y ponerlos en el asiento trasero. “Oh, todavía están allí;
ese paquete que saqué afuera todavía está allí.” Lo estará toda tu vida; lo que
aprenderás es a trabajar con él, conservarlo empaquetado, dejarlo estar allí
donde siempre puedes mirarlo y decir “hoy no, hoy no. Porque voy a sentir eso
que me da la intuición, mi alma, y el Creador, ¡el Campo!” Esto no funciona si
tienes miedo. El Campo, eso que te ayuda, te guía, te intuición de adónde ir,
qué hacer, ¡no funciona! si estás con miedo, ansiedad.
¿Y qué pasa con la
palabra de la gran T? “¿Cuál es la palabra de la gran T?” La
palabra de la gran t: Training (entrenamiento).
¿Cuántos de ustedes han sido entrenados (N.T.
se refiere a educados) en que nacieron sucios? ¿O en que a Dios no le
importan? A menos que ustedes hagan algo, y entonces a Dios le importará, de
repente. Los educan en que tienen que trepar muchos escalones, o ir para allá,
o para aquí, con objeto de que Dios aunque sea los mire. ¿Ustedes le harían eso
a sus hijos? Entonces, ¿los pondrían del otro lado del velo, los soltarían y
dirían, “Está bien, quiero que todos sepan qué horribles que son, y en segundo
lugar quiero que sepan que es mejor que teman a la muerte porque cuando mueran
no vendrán al hogar, irán a otro lugar y los vamos a pinchar y torturar todo el
tiempo, y a sus hijos también.” En eso los entrenan; ¿cuántos de ustedes fueron
educados en eso? con respecto a esta amorosa Fuente Creadora que tiene su mano
extendida, hermosa, y ustedes son imagen de ese amor. ¿Cuántos de ustedes
fueron educados fuera de eso? Simplemente educados fuera de eso. Piénsenlo. La
respuesta es: la mayoría.
Es hora de reestructurar todo lo que hayan aprendido
alguna vez; en este momento en que el mundo está de rodillas mirando qué va a
aprender, qué va a hacer después, cómo se recuperará, cuáles son las soluciones
que vendrán. Les diré: están próximos a
ver soluciones que son más compasivas y benévolas. Habrá excluidos, por supuesto; la vieja
energía está siempre allí, por supuesto, mientras este planeta está en su
renovación.
Pero lo más grande, lo primero, es para ustedes: ¿qué van
a hacer con el paquete, cuando termine la canalización? Si lo conservan
empaquetado, y entienden qué es lo que los aparta de Dios, tal vez sea el
comienzo del resto de su vida, de una manera más compasiva, benévola y alegre.
Volveré.
Y así es.
Kryon
Traducción y transcripción: M. Cristina Cáffaro