Canalización de Kryon por Lee Carroll
Berkeley Springs, W.Va. 2 de mayo de 2020
1 – La Detención Imposible
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Algunos preguntan, “Bueno, si está entrando una
consciencia desde el otro lado del velo, ¿cuánto sabes tú, Kryon, acerca de
todo lo que estamos atravesando?” Siempre ha existido esta sensación de que el
Espíritu, Dios, o como quieran llamar a la Fuente Creadora, está en la otra
habitación. Que ustedes están en la creación de su propia lucha, que tal vez
ocasionalmente un ángel entre y dé un mensaje y se vaya. Inclusive han construido un vocablo, “el velo”,
algo que les resulta difícil cruzar. Y todo esto es diseño de ustedes, de su
propia factura. Es su terminología, no la de Dios.
La Fuente Creadora ha construido un sistema en que la
disponibilidad de la fuente, poder y creación angélicos, todo eso, está justo
frente a ustedes. Es ustedes. Es eso que es el alma, el Yo Superior, que es
parte de ese vehículo llamado merkaba. Una palabra que es tal vez como una
burbuja de energía, de sacralidad, en que ustedes viajan. Verán, toda esta
percepción de que el Espíritu está allá y ustedes están aquí, eso lo inventaron
ustedes. Tanto lo han inventado que van y se presentan en un lugar de culto, y
se visten para eso, como si Dios no supiera cómo era su aspecto cunado no
estaban allí. Se visten con algo realmente bueno para poder ir a sentarse en
ese lugar, arrodillarse, cantar, rendir culto, irse. Como si abrieran la puerta
y dijeran “hola” a Dios y la cerraran de nuevo y volvieran. Esa es la
percepción de ustedes, pero nunca fue la de la Fuente Creadora que los hizo a
imagen de Dios.
Mientras están allí sentados y escuchan, ¿sabían que
están completos? Es solo su percepción de estar incompletos lo que crea su
realidad. Oh, quiero hablar de la realidad; quiero hacer eso hoy más tarde.
Ahora me gustaría darles alguna información en términos que ustedes puedan
entender, que habla de lo que ustedes hoy atraviesan de maneras enturbiadas.
Sabemos, nosotros, los de la Fuente Creadora, los seres angélicos, todos a su
alrededor, nosotros (se ríe), los que los apoyan en todas las cosas y los aman,
nosotros, los que extienden las manos para que ustedes las tomen, todo el
tiempo, cuando están en problemas, nosotros, sabemos lo que están atravesando.
Sabemos lo que el mundo está experimentando, y en la visión general es un poco diferente
de lo que ustedes creen. Lo pondré en términos muy tridimensionales. Esta
información en particular viene de una canalización que di recientemente para
unas pocas personas; no fue grabada de manera que luego hiciéramos distribuir
por mi socio como lo será esta, de modo que la doy otra vez, y es así.
Imaginen por un momento – un ejemplo muy tridimensional –
que están a cargo de una fábrica, y en esta fábrica hay mucha mecanización, hay
alta tecnología. Hay muchas piezas y partes moviéndose allí, y muchos, muchos
individuos manejándola. Cada uno hace su parte individual en esta máquina, o
tal vez su inspección, y fabrican un producto. Puede ser algo pequeño, o puede
ser algo grande, imagínenlo un momento. Incluso puede que ocupe un lugar muy
grande, y ustedes, como gerente, miran y ven tal vez cien individuos o más, y
ven los productos saliendo de la línea de armado. Y son buenos. Y esos
productos entonces van a muchas otras personas que los venden, y son buenos
productos, y los usan muchas personas que los necesitan. Se podría decir que es
una situación donde todos ganan, porque muchos trabajan, muchos usan los
productos, y el sistema es bueno. Y
ahora ustedes entran con un experto en eficiencia que ha contratado la gerencia
para que esté con ustedes. Y este experto en eficiencia mira todo y se pasa un
mes; esa persona, ese ser humano va y mira todo lo que se hace, y un día vuelve
e informa a ustedes, los gerentes, diciendo: “Saben, con unos pocos retoques
aquí, podrían obtener 20% más de producción. ¡Veinte por ciento! Eso es
asombroso en una fábrica. Y al hacerlo darían nuevo propósito a ciertos
individuos; todos ellos se quedarán con sus trabajos, pero ustedes les darán
nuevo propósito, ascendiendo a un nuevo nivel de inspección y haciendo cosas que
su producto realmente necesita, y podrían hacerlo más rápidamente. Y están
hechos todos los planos de diseño, y ustedes pueden mirarlos, y como gerentes
miran, y miran, y miran, y se ríen, y dicen: “Bueno, señor experto en
eficiencia, entienda que usted podría estar en lo correcto 100%, pero si vamos
a hacer esto, tendríamos que cerrar la fábrica. Podríamos tener que pararla por
dos meses, tal vez tres, mientras renovamos herramientas, cambiamos las tareas,
entrenamos a la gente, y durante ese tiempo ¡no habrá producción! Por lo tanto,
señor experto, no puede suceder.” Y
entonces no se hace.
Y eso ha sido un tema en muchas fábricas en muchos países
en todo el mundo; no pueden detener la producción con objeto de mejorar el
producto o cambiar el sistema. No es posible; no es factible. ¿O sí lo es?
¿Qué les ha pasado a ustedes? ¿Por qué están en casa?
¿Por qué no están en el trabajo? ¿Entienden esto? Esto es una metáfora; una de las dos que voy
a darles hoy, de lo que sucede cuando lo impensable es creado. Una detención de
meses, en la que ustedes pueden cambiar los propósitos, renovar las
herramientas, pensar las cosas, y volver renovados.
Ahora no estoy hablando de una fábrica, queridos; estoy
hablando de un montón de otras cosas incluyendo la consciencia de quiénes son
ustedes, de lo que están haciendo, de por qué lo hacen, de cosas en que ni
siquiera pueden reflexionar por estar ocupados, ¿no es así? Están ocupados en
su propia fábrica, seres humanos; en estar unos con otros de cierta manera,
todo el tiempo. Algunos saben exactamente de qué hablo aquí. Este es un tiempo
para un cambio. Otra vez: todo se detiene. Imposible, pero así es. Hemos dado
canalizaciones anteriormente, un par de ellas hablando de esto mismo. Una sobre
el ser humano que está en problemas y busca ayuda psicológica y le dicen, “Toma
un día de descanso, ve a caminar al bosque, y detén tu vida para poder pensar
las cosas.” Ahora tenemos todo un mundo que puede pensar las cosas.
Quiero darles otro ejemplo, y tal vez piensen que es
controversial, pero síganme. Los llevaré al siglo de los 1700, o tal vez los
1800 (N.T. siglo 18 o 19), no importa. Porque en Europa había un paradigma, y
ese paradigma era que cada uno de los países estaba en guerra con otro. ¡O se
turnaban! (se ríe) Se turnaban, pero las historias cubren cientos de años. Los
ejércitos, los conquistadores, invadían los diversos territorios pertenecientes
ya sea a Francia, o Alemania, o Inglaterra, o Portugal, o España. Y esos no
eran todos. Pero todos eran conquistadores en algún nivel. ¡Uno de ellos
conquistó una gran parte del planeta! (se ríe) ¡Este era el paradigma! ¡Vaya!
Piensen en las batallas que se veían, entre ingleses y franceses – no se
gustaban mucho unos y otros. Siempre en guerra, aparentemente. Y cuando no lo
estaban, descansaban para la siguiente. Cada uno de esos países tenían su propio
tiempo de crear una conquista de los otros. Algunos lo hacían bien, otros no;
algunos ganaban, otros no; y ustedes conocen los nombres de los conquistadores,
de los famosos, los napoleones y todo eso, y al estudiar la historia lo ven
repetirse una y otra vez, no cambiaba. No cambiaba.
Entonces creemos algo divertido. Tú, como individuo,
entras en una máquina del tiempo, y dices “Bueno, voy a conocer alguna gente
común del siglo 19, tal vez del 18, hacer una pequeña discusión, y ellos
estarán sentados en el borde de sus asientos diciendo ‘¡Vienes del futuro!’ Y
tú dices ‘Sí’. ‘¿Y qué está pasando?
¿Qué pasó? ¿Qué conquista hay allí?’ Y lentamente empiezas a contarles lo que
pasó hace 75 años. Estás allí reuniéndote con los que están en el pasado y te preguntan
cómo es, y les cuentas sobre la gran Guerra, y les dices que hace 75 años algo
pasó. Y ellos no lo creerán; dirás “En ese punto del tiempo, en esa coyuntura, todos
esos países decidieron que no permitirían que pasara otra vez, ¿qué podemos
hacer para impedir que se repita? Y decidieron armar una organización de
comercio entre unos pocos, y se sostuvo. Y en un cierto período dijeron ‘bueno,
eliminemos las fronteras, no tengamos más fronteras. Hagamos una unión que
funcione toda junta, para poder viajar fácilmente entre todos estos antiguos
enemigos’ Y se sostuvo. Y luego, contra todas las probabilidades,
dijeron ‘Tengamos, algunos de nosotros, una moneda en común’. ¿Pueden imaginar,
cambiar su dinero, para estar con el dinero de otros países? Y lo hicieron.”
Ahora bien, queridos, algunos que oigan esto dirán, “Sí,
eso es la Unión Europea, y no funcionó”. Quiero que piensen un momento. La
economía de todo eso todavía está en prueba y ensayo, y la razón es que nadie
en este planeta hizo esto, nunca. Y tiene que ser ajustado y reformulado,
rehecho para que sea justo, todavía no está terminado., está todavía a prueba.
Pero ¿qué han logrado ellos? Déjenme preguntar: ¿ellos fueron a la guerra otra
vez? La respuesta es no. En otras palabras, se requirió una detención completa,
una devastación, en su caso completa, con objeto de volver a resolver este
rompecabezas, esta fábrica de la consciencia, con todos esos países para
unirlos de una manera que nadie siquiera soñó con poder hacerlo unos pocos
siglos atrás. ¿Ven lo que estoy diciendo? Ustedes están en esta situación, y
puede marchar en muchas direcciones. Hay algunos que querrían devolver todo lo
que ustedes hicieron a las viejas maneras, están cuidadosamente armando eso.
Les diré: eso no va a funcionar. Prepárense para cambiar las tareas, para una
nueva consciencia, para lo que los futurólogos dirán que venía. Van a un lugar
donde pueden recuperarse mucho más fácil que si hubieran tenido una guerra.
Piensen en esto. Piensen en la benevolencia de esto. Eso es lo que quería
decirles.
Ahora están en una posición para lo grandioso, para la
grandiosidad. Les digo estas cosas porque hay cosas llegando, que yo sé que
están llegando, cosas que los desilusionarán, que los enojarán, cosas que
cambiarán. Pero si les hablo en unos pocos años me dirán “¡Vaya! ¡Necesitábamos
eso!”
Y aquí están. Yo volveré, queridos, quiero hablar un poco
más sobre la realidad.
Y así es.
Kryon
Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro