12 abril 2020

Kryon ante la Hermandad Femenina Lemuriana (76)


Canalización de Kryon por Lee Carroll
ante la Hermandad Femenina Lemuriana (76)
Toronto, Canadá, 4 de abril de 2020
Las Enseñanzas Femeninas de Lemuria
Saludos, queridas damas, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Mi socio se aleja para esto. Tal vez ustedes no han visto esta cosa especial anteriormente. La canalización es diferente para la Hermandad Femenina. Es diferente para mi socio; es energía diferente; es una energía femenina; no se confundan por la voz. El Espíritu no tiene género; podrían decir que el Espíritu es ambos. Mi socio, siendo varón, se aleja totalmente y no accede al mensaje hasta más tarde, cuando escucha la grabación. Y digo esto porque es en honor a lo femenino. Hoy ese honor, con lo que está pasando en el planeta, es más valioso que lo que nunca fue antes.
En la conferencia hoy más temprano, mi socio dijo algo, lo dice bastante seguido, impulsado por lo que yo le he dicho antes. Dice: “cuando un humano se encuentra en problemas, pide a su mamá.” Esa es una fuerza muy potente, y la figura del padre es la figura sabia, la figura fuerte, pero si estás en problemas, recurres a mamá.
Esta es la base, la premisa, detrás de toda la idea del chamanismo femenino. Que quienes son femeninas en el planeta ahora, ahora mismo, son también las que fueron mujeres antes, y eso se refiere a Lemuria. Eso es por designio, damas. Si alguna vez se preguntaron si era por accidente que están aquí una vez más como mujeres, después de 2012, no es por accidente. Entraron a propósito. Muchas de ustedes estaban en el viento del nacimiento, diciendo: “Realmente quiero entrar y experimentar esto. ¿Despertaré? ¿Recordaré? Lo femenino dentro de mí ¿se relacionará con lo que hice en Lemuria y en otros lugares? ¿Podré recordar – o no – las enseñanzas de las Madres de las Estrellas? ¿Cómo va a funcionar esto?”
Ustedes entraron de todos modos, y ahora ya saben cómo va a funcionar. Y es por eso que no es por accidente que descubrieron este lugar; no es por accidente que Mele´ha ha recogido el guante (N.T. aceptado el desafío) y ha recordado lo que se suponía que debía recordar de las maneras que ella tenía que recordar para aumentar la enseñanza y cambiarla para estos tiempos.
Pero aquí están ustedes, tal vez en tiempos de prueba, en tiempos difíciles, y me gustaría decirles: no es por accidente que eres una mamá – incluso a las que no tienen hijos aquí, igual son mamás – y ese es el punto. Es lo que tienen para ofrecer a este planeta justo ahora, es femenino puro; es la compasión, la comprensión; es la que mira sin juzgar; es la que consuela, aun si tiene miedo. Es lo que hacen las madres, y es lo que siempre han hecho.  Sus Madres de las Estrellas bien les enseñaron que vendrían tiempos en que ustedes también recogerían ese guante, igual que lo ha hecho Mele´ha, y consolarían a los que estaban a su alrededor de una manera que incluso supera a lo que creían que podrían hacer.
Las presentes en este espacio, tal vez cien, están aquí verdaderamente por una razón: esa femineidad que ustedes tienen es preciosa. Están aquí por una razón en este tiempo: para que capten otra vez más esa parte de ustedes que deben recordar, que es sagrada. No para que hagan reuniones y canten canciones, y para socializar, sino para que se arremanguen y se pongan a trabajar.  Igual que lo haría una madre con su bebé; este planeta es el bebé de ustedes. Y lo tratarán como algo suyo, y lo amarán como algo suyo, y mostrarán a los que las rodean que ustedes son fuertes en su compasión, que su intuición prevalece, y hacen cosas que solo las mujeres pueden hacer. Y hacen las cosas mejor porque las hacen como solo un chamán las puede hacer.
Esta es la enseñanza; es la razón para que estén aquí; entonces les diré: nada es accidental. Escuchen cuidadosamente lo que sigue; entiendan que tal vez lo que están haciendo aquí es más que lo que creen, y sientan dentro de sí el orgullo por haber venido y haber conectado.
Y esa voz, en el viento del nacimiento, que dijo ¿Recordaré? ¿Cómo sabré? Han recordado, y ahora lo saben. Felicitaciones, mujeres, sigan así. Sigan así.
Y así es.
Kryon
Transcripción y traducción: M. Cristina Cáffaro