Canalización de Kryon por Lee
Carroll
en Phoenix, Arizona, el domingo 17 de enero de 2016
Lo Básico de Creer
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio
Magnético.
Los mensajes que doy al final de un seminario de dos
días, y especialmente el segundo día, suelen ser de tipo personal. Sabemos que muchos escuchan después del
evento, incluyendo a quienes están aquí, pero quiero hacer este para los que
están en el salón. Especialmente para
quienes están en el salón.
No deberíamos tener que decir este tipo de cosas,
porque la energía habla por sí misma, y lo importante es el discernimiento,
pero igual las decimos. En este salón
hay mucha actividad que ustedes no pueden ver. Pone a prueba su sistema de
creencia, queridos, pensar que mientras están aquí sentados sucede mucho más
que lo que saben. Una de las energías
que es muy importante, que es el catalizador por el cual vinieron, o creen que
vinieron, es la creencia. También es la
configuración de por qué vinieron, cuán abiertos están para lo que
verdaderamente está aquí, no para lo que pensaban que había aquí. Cuán abiertos
están para lo que podría haber aquí que excede a lo que presentaron los humanos
en el escenario. ¿Será posible que hayan
sido traídos aquí para que aquellos que ustedes no pueden ver trabajen sobre
ustedes? ¿Qué les dice su creencia? ¿Está bien o no lo está? ¿Es ridículo?
¿Es real?
Me gustaría que pudieran abrirse ahora mismo al amor
que sentimos por ustedes; cancelaría las dudas y los miedos en este salón. Levantaría inmediatamente lo que ustedes
llevan como un prejuicio sobre lo que se están llevando de aquí. Si pudieran sentir ahora mismo,
cuánto le importan a la Fuente Creadora, verían una perspectiva más grande,
mucho más grande.
Una de las preguntas, una buena pregunta, que se
formuló: ¿Hacer algo en un seminario es una cosa y cuando uno llega a casa es
otra cosa? Podría decirles, queridos,
que la razón es la creencia. Desearía
poder hacer algo en este momento, pero lo que deseo les quitaría su libre
albedrío, y eso es que ustedes pudieran sentir intensamente cuánto le importan
a Dios. ¡Sabemos sus nombres! ¡Conocemos sus almas! Intencionalmente hay un velo para que ustedes
lo quiten; es a propósito. Y les
pregunto: ¿cómo les está yendo hasta aquí?
¿Cuál es su creencia respecto a lo que sucede en este momento? ¿Creen que a su alrededor hay entidades, o
ángeles, o como los llamen, que no pueden ver?
Queridos, existe un mundo multidimensional lleno de
energías que conocen sus nombres. Cuando
ustedes tienen una actitud, cuando tienen incredulidad o miedo, ellos no pueden
tocarlos. Deben ser invitados. Antes de
venir y pasar por la puerta, ¿los invitaron a dejar caer su prejuicio? ¿Los
invitaron para que pudieran salir de su cáscara por un ratito y sentir? Estas cosas están aquí para ser
sentidas. Tal vez ustedes no pensaron en
esto; tal vez esto es para el futuro. Cuando entraron, ¿decidieron qué iban a
aprender y qué no ? ¿Están viendo este
evento como algo que está aquí y ustedes están allá? ¿O comprenden que aquí hay algo mucho más
grande para ustedes? ¡Conocemos sus nombres! Conocemos sus rostros, las
desilusiones que tienen, las alegrías.
Sabemos qué están tratando de hacer.
¿Cómo se siente tener un entorno?
No voy a numerarlos, porque no se pueden contar; es un entorno de
energías que se van con ustedes y permanecen con ustedes, duermen con ustedes,
comen con ustedes. No pueden tocarlos,
no pueden decirles hola, no pueden decir "te amo." No pueden decirles quiénes son ustedes; todo
lo que pueden hacer es sentarse a esperar que ustedes se lo pidan. Eso es todo,
todo lo que ustedes tienen que hacer.
Cuando mi socio, en total y completa incredulidad, que
se burlaba de la Nueva Era y de todo lo relacionado, cuando este hombre estuvo
perplejo ante un problema y se sentó en la silla, y la única manera de poder
saber alguna verdad era hacer el pedido, este incrédulo, lineal al máximo, dijo
las palabras: "Si estás allí,
¡muéstrame!" Y nosotros llenamos de
amor su corazón y las lagrimas rodaron por sus mejillas. No lo convencimos; de
hecho, se enojó. (se ríe). Dijo que lo estábamos controlando. Pero allí había algo. Y el ingeniero no podía olvidarlo; algo había allí, y se
sentó en la silla - y algo sucedió.
Ahora bien: ese es el acertijo, ¿verdad? Estaba fuera del ámbito de su educación, de
su caja de realidad; obtuvo un resultado, porque en ese momento dijo
"Muéstrenme." ¡Y lo decía en
serio! Estaba listo para cambiar su
creencia, y eso hizo.
Estuvimos a su lado toda su vida, y conocíamos los
potenciales de lo que él haría, ¡durante más de cuarenta años! Caminamos con él, dormimos con él, lo vimos
llorar, lo vimos reír. Fuimos a la escuela con él. Nunca dijo nada; igual que ustedes. Este es el sistema, queridos, del alma
antigua. Están aquí en una búsqueda de
aprender cosas.
Esperemos que no hayas decidido qué cosas ibas a
aprender, porque no sabes lo que no sabes. ¿Qué tal si lo que ibas a aprender
nunca se presentaba en el escenario?
Pero ahora se presenta, si aceptas soltar esa burbuja que te rodea y
permites a Dios entrar. Eso es la familia. Y lo reconoces inmediatamente; te
vas a casa con ello. Te llenará con un
sentimiento de paz tan diferente que, cuando te sientes en la silla en casa y
digas: "Estoy aquí," o medites, inmediatamente nos habrás invitado a
tomar tu mano, a empezar a trabajar contigo en una forma no académica, no
intelectual; está directamente en el corazón; verás: estás conectado con nosotros,
plenamente, en cada minuto del día. Y
esto es lo que queríamos enseñarte ahora, sentados en la silla. Tal vez es por
eso que viniste: estamos conectados. No
importa tu género; eres un alma antigua, has estado aquí antes, ¿cuál es el
sistema? ¿Qué piensas realmente que es
el sistema? ¿Estás tratando de resolverlo,
o estás tratando de permitirnos entrar?
No necesitas resolver nada, ¡realmente no! De veras que no. Todo lo que necesitas hacer es abrir tu
corazón a algo más grande, de lo que nada sabes. Y allí entrará la
sincronicidad que te llevará a lugares, que te impulsará, que tú sabes que te
ama, y empiezas a caminar por un sendero en el que literalmente te das vuelta y
dices: "¡Yo también te amo!" Empiezas a sentir de tal manera que hay
una fuerza en este Universo más grande que tú, que este planeta, que los
gobiernos, que los sucesos; es más grande que todo eso, y tú caminas en medio
de ella, alma antigua.
Los ciclos mismos del planeta; la vida misma, es parte
de la energía que llevas contigo; ¡lo es!
No es académico; no puedes escribirlo; simplemente ES. Y pronto empiezas a darte cuenta de que no
estás solo, simplemente no estás solo, nunca. Pronto te darás cuenta de que
hemos tomado tu mano y no la soltaremos, porque nos diste permiso. Verás: no somos lineales; una vez que nos
permites entrar, una vez que das permiso, una vez que empiezas a pedirnos que
estemos cerca, no es como en la 3ªD donde las cosas se marchitan y se van con
el tiempo. Estamos allí siempre.
Esto es el comienzo de lo que viniste a buscar. Porque entonces comienza la enseñanza; lo que
se haya presentado aquí palidece en
comparación con lo que vas a descubrir tú mismo cuando camines con Dios. Esa es la respuesta a todas las preguntas que
tienes.
Y empieza teniendo paz, paz con todas las cosas de tu
vida, sean cuales sean tus problemas.
Paz porque se está trabajando en esto, porque hay sincronicidad en tu
vida, porque te amamos lo suficiente como para cuidar de ti. Porque no tienes que hacerlo solo.
Algunos de ustedes vienen de una cama de hospital; yo
sé quién está aquí; y dudan de que nuestra presencia los haya ayudado a
superarlo. Algunos vienen de otras
situaciones o dramas; nosotros los ayudamos a superarlos. No necesitan hacer esto solos. ¡Los tiempos son todo! Dejen de impacientarse, esperen la
sincronicidad, y sepan que, no importa lo que parezca ser, el amor de Dios les
dará un resultado benévolo para cada cosa en su vida.
A veces no parecería así, porque en su linealidad
ustedes ya decidieron cuáles creen que son sus soluciones; no recibieron lo que
pensaban y entonces se van y se desilusionan.
No otorgan ninguna credibilidad al hecho de que puede haber algunas
cosas que ustedes no conocen. Personas
con quienes aún no se han encontrado, cosas que tal vez no se han descubierto,
o que ustedes no han descubierto, que están viniendo en camino y tienen sus
nombres en ellas. ¿Alguna vez pensaron
eso? ¡Sabemos quién está aquí! Sabemos quiénes son ustedes. Y esto es personal, ¡es personal!
Verás: al final de tu vida, y estará allí, un deja vu
para cada uno al soltar el último aliento, y está lleno de miedo, dolor y
desilusión el potencial de morir, y para los que te rodean, y luego - casi en
una fracción de segundo, incluso antes que se enfríe tu cuerpo - llega un
despertar en un nivel del que ni siquiera tienes conciencia, que es "¡Yo
recuerdo esto! ¡Está bien! ¡Vaya, casi
no puedo esperar para la fiesta!"
Tienes que considerar a quienes dejaste atrás, eso es lo más difícil, tienes
que amarlos, tienes trabajo que hacer, pero estás bien, porque eres eterno,
porque eres mi familia. Yo soy tu familia, y eres parte de la Fuente Creadora.
¡Realmente es verdad! Después de la
muerte, hay vida; de hecho, la Tierra es
lo temporario. La cosa real es cuando no
estás aquí; eso es lo real.
Y luego regresas.
Ya te dijimos que eso está cambiando, que es nuevo, realmente nuevo. Que
cuando despiertas de nuevo, algo en tu interior tiene una mayor sabiduría,
eficiencia, si lo deseas, una consciencia más elevada, e incluso como bebé
cuando abres los ojos y ves las luces, recuerdas: "¡Ah, sí! Deja vu; estuve aquí, ya hice
esto." Estás de regreso.
Hay un círculo de amor que en este momento sostiene tu
mano, tratando de hacerte entender que hay belleza en el sistema; sabemos quién
eres, hay sincronicidad disponible, puedes empujar los límites todo lo que
quieres porque estás en control de lo que piensas que es la realidad. Empujas la curva en forma de campana, la
haces como quieres, creas las suerte; para aprender eso es que estás aquí.
Pero nada de eso va a suceder a menos que lo creas.
Irás y volverás, una y otra vez, a lugares como éste, pero si estás
juzgándolos, incrédulo y a la defensiva, te comprometes con un mundo
enteramente diferente.
Entonces te digo: hermano querido, hermana querida,
nuestra mano está extendida con amor.
Depende de ti; si lo crees o no; si te comprometes o no. Una vez que inicias el camino, estamos
siempre allí. No puede haber un mensaje más sencillo y más grande : la trama
del universo está hecha de amor y compasión.
Y la lección para la humanidad es cómo usarla, cómo tomarla, crearla, y
mostrar a otros qué es.
Excede a la doctrina, a las reglas, al conocimiento y
todas las cosas por las que viniste; puede sintetizarse como una parte del amor
de Dios. Quiero que te vayas de este
lugar llevando este mensaje en tu corazón, en tu cerebro, en tu intelecto. Y si no lo recibiste y no lo entendiste,
puedes invocarlo otra vez, porque siempre estamos cerca de ti, siempre. Y siempre lo estaremos. Hasta tu último
aliento, cuando la cortina cae y ves nuestras sonrisas y vemos la tuya. Ahora celebramos otra vida en amor.
Y así es.
Kryon
Desgrabación y traducción: M. Cristina Cáffaro