Canalización de Kryon por Lee Carroll
en Phoenix, Arizona, el sábado 16 de
enero de 2016
Cinco en un círculo
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio
Magnético.
Me gustaría que este sea un mensaje informativo, pero
quiero que te relaciones con él. Mi socio se hace a un lado completamente. No
tiene idea de lo que seguirá; yo le di una idea de lo que podría tratarse, de
modo que no le resulta un misterio, pero no sabe más allá de eso.
Queridos, quiero hacer algo que a veces es peligroso
para la lógica; lo que quiero decir con eso es que su lógica toma el control,
entonces la información es peligrosa porque su lógica se interpone.
Yo no les doy listas, porque ustedes siempre las ven
como jerárquicas: el número uno es más importante que el número dos, o al
revés. Cada vez que se entrega algo,
uno, dos, tres, cuatro, existe una tendencia en el cerebro lógico a poner uno
por encima de otro porque se mencionó antes.
Entonces les pregunto: ¿tengo alguna alternativa a hacer una lista? No puedo darles todo a la vez; sería
cuántico. Entonces tengo que darles las
cosas una por una; las numeraré. Por lo
tanto lo organizo así: quiero darles información para todas las almas antiguas
y para los trabajadores del luz con respecto a los tipos que en este planeta
están trabajando en un modo de solución para resolver los enigmas de la nueva
energía en colaboración con otros trabajadores de luz. Para hacer eso, voy a tener que detallar lo
que son algunos de ustedes en razón de su akash, lo que algunos están haciendo,
porque están aquí. Les daré algunos nombres para considerar. Pero quiero que
por un momento piensen en esto: todo lo que les daré está en un círculo.
Por un momento piensen en un anillo, hermoso, unido,
ininterrumpido. Alrededor del anillo hay atributos: números, si lo desean. De modo que en el anillo no importa por dónde
empiezan o en qué dirección van, tendrán todos los atributos, y el conocimiento
estará en el anillo.
Ahora bien; en la linealidad, en la línea recta que
ustedes llaman tiempo, voy a tener que darles estas cosas de a una por
vez. Pero ninguna es más importante que
la siguiente ni menos importante que la anterior. Aquí es donde quiero que comprendan que lo
que les voy a dar no tiene importancia de uno por encima de otro: está todo
junto.
Ahora bien; acabo de darles también información. Una de las cosas más difíciles cuando el
Espíritu habla a los humanos, incluso a un humano: solo podemos hablarles de
una cosa por vez. A veces ustedes toman
el primer punto y nunca escuchan el número tres o el cuatro, y el número uno se
convierte en su verdad. Si abrieran su corazón y su mente para recibirlos todos
y darse cuenta de la verdad que está en todos, serían personas espirituales más
sabias. Pero es el sesgo de la
humanidad, que singulariza una cosa y el tiempo que, a causa de su linealidad,
crea lo que les voy a explicar.
Los sistemas espirituales del planeta, en los que
ustedes tratan de encajar, normalmente invocan un propósito singular, sea cual
sea el sistema espiritual, o lo que ustedes llaman organizado, o incluso una
religión; los hacen observar reglas.
Depende de ustedes, entonces, encajar en todas las reglas que puedan,
obedecerlas lo mejor que puedan, y la idea es una igualdad de propósito, En algunos de ellos, ustedes usan la misma
ropa, actúan de una cierta manera, meditan en un cierto lugar, oran en un
cierto lugar, hacen esto o aquello a cierta hora, se inclinan en una dirección,
y todos lo hacen de la misma manera.
Si echan un vistazo a cualquier sistema complejo en el
planeta o en el universo, o en la galaxia, van a encontrar que las partes hacen
cosas diferentes. Si consideran la Física, las partes hacen cosas distintas,
están dedicadas a energías diferentes.
En la Química, si miran profundamente, las partes se combinan con objeto
de crear otras cosas. Donde miren en la naturaleza hay partes, una apoya a la
otra. El mismo sistema de la vida, con
oxígeno y dióxido de carbono, está compuesto de todas las partes de la vida que
los mantienen vivos. ¿Qué pasaría si les
digo que de repente todas las partes se van a vestir del mismo modo y hacer la
misma cosa? (se ríe) Ustedes dirían que no es una solución
viable. Y tendrían razón. Frente a
ustedes, existe un sistema elegante que concierne a las almas antiguas.
Ahora bien, volvamos atrás. Alma antigua, estás aquí por una razón, por
un propósito; si has despertado a la verdad, una verdad tan grande y hermosa, una
verdad que no considera equivocados a los demás, una verdad que mejora a toda
la humanidad, y esa verdad es esta: Dios está dentro de ti. Otra verdad: la energía de este planeta está
cambiando. Otra verdad: las almas
antiguas, que se fueron y volvieron, y se fueron y volvieron, una y otra vez,
portan gran sabiduría para esta época del planeta. Otra verdad: las almas antiguas están
despertando a diferentes tareas con objeto de suministrar una solución en la
nueva energía.
De modo que quiero hablar sobre las diversas ranuras
en las que ustedes encajan (se ríe).
¡Muy lineal! Pueden reconocerse a sí mismos.
Es complejo, de modo que lo haré simple, y hoy solo voy a desarrollar
cinco.
Ahora bien: todo lo que diré de ahora en adelante,
pueden analizarlo más tarde y encontrar los significados ocultos en la mayoría
de ello, específicamente en la numerología.
Queridos, les doy mensajes dentro de mensajes, de modo que ustedes
puedan estudiarlos después y ver que hay más, mucho más que lo que presento en
el lenguaje de mi socio.
Quiero darles algunas buenas noticias. Queridos, ahora
mismo hay disponible un sistema hermoso, muy hermoso, y ustedes están
resolviendo el acertijo y ni siquiera lo saben. Algunos de ustedes lo
cuestionan, porque están acostumbrados a la singularidad de sus sistemas
espirituales. Algunos de ustedes miran a
mi socio y dicen, "Yo no puedo hacer lo que él hace, por lo tanto (se ríe) no estoy a la altura del alma
antigua que él es." No comprenden;
simplemente no entienden. Entonces, que
este sea un momento para entender; no sólo para entender: ¡para celebrar!
Algunos que están oyendo esto necesitan oírlo. Es fácil: todos tienen
diferentes tareas (se ríe) y lo que los conduce y los pone en esas áreas o
ranuras dentro del círculo que queremos crear, el anillo, es su akash. La energía de quiénes han sido y lo que han
hecho crea la energía de lo que están haciendo y de lo que sienten al
respecto. Eso es específicamente espiritual.
También puede estar en la 3D: en qué están
interesados; sus talentos; pero estamos hablando de almas antiguas y de
propósito espiritual; de lo que están haciendo y por qué están aquí. Es peligroso categorizar a los humanos de
alguna forma, porque la singularidad de su prejuicio los va a llevar entonces
más allá, que si estoy en esto, si estoy en aquello, si voy a ir allí, si no
voy a hacer esto; ¡quiero que suspendan
todo eso y solamente escuchen!
Quiero hablarles de las almas antiguas y de lo que
hacen: ahora trabajan juntas en el anillo.
Un hermoso anillo, un círculo dorado. Es un círculo de amor, de
creación. Y las almas antiguas y los trabajadores de luz ingresan al planeta en
una solución perfecta, en números perfectos, en equilibrio perfecto, y ni
siquiera saben que existe un sistema (se
ríe).
Quiero empezar por mi socio - y los que son como
él. Usaré una terminología que no usé
antes: entrelazamiento akáshico. ¿Qué saben sobre la palabra
"entrelazamiento"? En realidad, muy poco. Es una palabra bastante
nueva, creada por sus físicos, y básicamente significa una realidad
compartida. En Física, si dos cosas
están entrelazadas, ambas tienen la misma realidad aunque estén una muy alejada
de la otra en lugares diferentes. Es una
expresión cuántica: realidad compartida.
Alguien que está entrelazado con su akash está compartiendo la realidad de
algo que lo impulsa desde el pasado. Y para él es difícil descifrar la realidad
de lo que es terrenal, la realidad de lo que está en el pasado o bien del otro
lado del velo. Y así son conducidos.
Ahora bien: en el universo, en la galaxia, en el sistema solar, hay una palabra
que se usa en astrología; es una metáfora; la palabra es Yod, y - o - d. En
astrología es la alineación de tres cosas,
única y especial, que no suele ocurrir, y que crea una energía en
aquellos que nacen con eso, que son impulsados y enfocados en una forma muy
poco razonable (se ríe). Viven y respiran lo que creen que deben
hacer. Y eso viene del akash. Queridos,
no ocurre solo porque nacen. Sucede lentamente porque ustedes van hacia la
realización, se dan cuenta de ello. Eso significa que llegan a darse cuenta de
aquello de lo que no se daban cuenta, van de lo inexistente a lo existente, por
una decisión consciente.
En otras palabras: si eligen no aceptar algunas de
estas cosas, nunca se les ocurrirán. Pero una vez que inician el sendero del
examen, los atraparán de buena manera, y los impulsarán con tal fuerza que todo
lo que hagan tendrá que ver con esa cosa única.
Una categoría como esta, de almas antiguas entrelazadas akáshicamente,
es la de los que se ven impulsados a trabajar. Algunos son canalizadores,
algunos son escritores, autores, algunos dan charlas, y sus vidas no son
normales. Todo lo que hacen en sus horas de vigilia es pensar en por qué están
aquí.
Se presionan a sí mismos, y comprenden adecuadamente
los problemas de salud que tienen yendo a lugares como objetivos de cada día y
dedican hasta su último aliento a esa cosa, cualquiera sea. Singulares,
enfocados, presionados. Y hermosos,
porque consiguen hacer mucho.
Ahora bien, hay una tendencia... No; no es una
tendencia; es un prejuicio... No, es una
forma de pensar que los mira y dice: "Oh, míralos; yo tendría que hacer
eso." Y de eso queremos
hablar. Esa es una de las cinco cosas en
el anillo, todas apoyándose unas a otras.
Tienen que estar los entrelazados akáshicamente, con objeto de empujar
esta nueva energía hacia adelante como lo están haciendo. Tienen que estar.
Mi socio sabe esto y ha visto su propio cambio. Ahora
él se da cuenta de que es todo lo que va a hacer, se da cuenta de que nunca se
jubilará. De alguna manera sería como
traicionar al akash que le dice que tiene que empujar hasta el final. Y tiene otros que son iguales que él. Es todo lo que van a hacer; ven la belleza y
el esplendor del otro lado del velo y todo lo que pueden hacer es mostrarlo,
mostrarlo, mostrarlo; hablar de eso, escribir sobre eso, ser eso. Es todo lo
que quieren hacer.
Uno entre cinco tipos de propósito, podría decirse.
¡No es una misión! ¡No usen la palabra misión!
De repente tienen una misión militar: ¡no se trata de eso! Es un entrelazamiento con todo lo que es, que
es sagrado y espiritual y akáshico. Él lo ha hecho antes. Es entrelazamiento
akáshico. Ahora está cómodo con ello, y es lo único que quiere hacer.
Ese es el número 1. ¿Qué es el 1 en la
numerología? Nuevos comienzos. Ese es el propósito de quienes se ven
impulsados por el entrelazamiento akáshico: están enfocados así; todo lo que
hacen, a donde sea que vayan, es un nuevo comienzo. Ellos no terminan nada.
Nunca está completo (se ríe); es
siempre nuevo. El número uno.
El número 2 es similar. El akash parcialmente entrelazado (se ríe).
Estos no tienen tanta presión, pero igual sienten como si así
fuera. Están un poquito más relajados
con ello. Está bien retirarse. Sienten
que tienen un propósito en el planeta.
Ahora bien, estos, los número dos, se manejan con la dualidad, se
manejan con el cuerpo humano, son los sanadores. ¡Son los que estuvieron buscando soluciones
que sostuvieran a los número uno! Si el
número uno exagera, necesita un número dos para sanar. Son trabajadores del sistema, lo tienen
resuelto, encuentran sistemas que ayudan a la humanidad; ellos también están
enfocados. Tienen un akash parcialmente
entrelazado; pueden recordar haber sido sanadores anteriormente. Pueden recordar los sistemas que están
trabajando, que han utilizado antes. Están tan seguros, que quieren escribir sobre
eso, enseñar sobre eso, ¡es tan obvio!
Capas y fases. Y lo que esto hace
es terminar siendo una pieza del rompecabezas del todo, pero específicamente
ayudan al número uno. Es un grupo de
apoyo para la humanidad y para el número uno.
El número uno se presiona hasta dejar de comer, hasta que alguien le
dice que tiene que comer. El número dos desarrolla qué comer (se ríe).
Existe un hermoso sistema de ayuda. Es como un reloj
suizo, donde un engranaje encaja con el otro. La cosa que combina todo esto -
se lo digo antes de darles todo el resto de esto - la cosa que combina todo es
la sincronicidad. Cuando yo termine, cuando haya completado esto hoy, les habré
dado cinco tipos. Ustedes tienen una tendencia a preguntar. ¿Qué tipo soy
yo? ¡Les dije que pueden estar en dos o
tres de ellos? ¿Les dije que hay un
pasaje o cruce? ¿Les dije que hay puntos
grises? ¿Les dije que es cuántico? No
traten de encajarse en estos; solo sepan que existen y que en algún grado
encajarán. pero comprendan esto: algunos de ustedes ya han experimentado la
sincronicidad de estar aquí. De escuchar. Comprendan que son parte de ello, del
mecanismo de este hermoso reloj que se mueve en el tiempo propio de ustedes, y
encaja, y todos encajan con los otros, porque se apoyan uno a otro. Esperen a
que les cuente sobre el número tres.
El 3 es el número catalizador: mueve las cosas. La
existencia misma del número tres es catalizadora para cualquier cosa que entre
en contacto con él. Un catalizador es algo que permanece igual pero cambia a aquello
que entra en contacto con él. Les diré
quiénes son estos. Son los meditadores del planeta. Y su akash - já, já - ¡es
tan cómodo! Porque pueden sentarse a
meditar durante días, y salen renovados.
Se sientan en una posición y ¿qué están haciendo? Les diré qué hacen. Están sosteniendo la energía para todos los
otros juntos, porque su consciencia es estable, tranquila, es hermosa. Establece un escenario que todos los otros
sienten.
Quiero contarles sobre este reloj, este anillo; cuando
el número uno llega a la frustración, el número tres es parte de él. Él siente
al número tres. Esto de meditar no es
parte del número uno en absoluto; para él es empujar, empujar, mover. Y el número tres lo lleva a otro nivel. De
una manera cuántica lo comparte con el número uno y el número dos, y ellos
tienen paz, se relajan, y saben que todo está bien, porque el número tres está
aquí haciendo su tarea.
El número tres ha tenido vidas como monje, en todo el
planeta, de sentarse y simplemente ser.
Allí hay enorme poder. Y como trabajador de luz - socio mío, escucha
esto - ¿alguna vez (se ríe) has
mirado al número tres y te preguntaste cómo podía hacer eso? "¡No es para mí! ¡Simplemente se sientan
allí!" (se ríe) Ahora ya lo
sabes. Se sientan allí y estabilizan el planeta. Estabilizan a todos los otros números, porque
los absorben de tal manera. Ahora bien,
yo no dije que conectaran a tierra, ¿no?
Eso vendrá después. Estos son
meditadores. Crean una actitud pacífica, y son catalizadores. Lo que se les
cruza en el camino es más pacífico debido a ellos. Ustedes tienen algunos aquí. Pueden darse
cuenta de quiénes son. El número uno y
el número dos necesitan desesperadamente del número tres. Pero el número tres también necesita al uno y
al dos, porque con solo estar sentado allí no cumple lo que tiene que hacer el
uno. ¿Empiezan a comprender el círculo?
Encuentran el sentido de que haya un sistema en que las almas antiguas
hagan diferentes cosas para el planeta para que funcione? No son todos uniformes, no son todos del
mismo género, no tienen todos una doctrina o sistema de creencia, no se
inclinan de cierta manera ni hacen la misma cosa, no cantan las mismas
canciones. Completamente, enteramente únicos y diferentes, encajando unos con
otros como un bello reloj suizo.
Número cuatro. ¿Qué creen que es el número cuatro? (se ríe).
Si tienen educación en numerología, el número 4 es el número de Gaia.
¿Alguna vez me han oído decirles que Gaia está relacionada con la consciencia
humana? ¿Que lo que le pasa a eso que ustedes llaman planeta Tierra está
profundamente conectado con ustedes? Si
le preguntan a los ancestros, a los antiguos, lo primero que ellos conocieron
tuvo que ser Gaia. No había tecnología; Gaia les daba su alimento, y en cierta
forma, el clima, todas esas cosas; eso era lo más importante que tenían: Gaia.
Ustedes han perdido eso. La conexión no les importa
tanto - ¡pero es importante! Déjenme
contarles sobre el número cuatro.
Algunos de ellos ni siquiera saben que son trabajadores de luz. Solo
saben que están conectados con la Tierra.
¡Pero están apasionadamente conectados con la Tierra! Cuando están abrazando un árbol, ¡no se los
puede apartar! (se ríe) Necesitan ser parte de Gaia todo el tiempo.
Pregunta: "Querido Kryon, nos vas a dar estas
fases, estas partes, estos compartimientos. ¿Puede alguien cambiar desde un
compartimiento y estar en el compartimiento próximo en una misma
vida?" Humanos, ¿por qué hacen
esto? (se ríe) ¡Sí! ¡Sí, pueden hacer lo que quieran!
Ahora bien; quiero que piensen en eso. ¿Podría un
número tres volverse un número cuatro?
¿Podría el número cinco, que todavía ni siquiera lo oyeron, volverse un
número uno? El sistema está en un
círculo: ¡claro que pueden! Hay maneras
de captar esas energías, de aprender cosas, de moverse, ¡de modo que es
dinámico! Y eso es la otra cosa que no
van a andar llevando consigo. Tan pronto hacen una lista y se ponen en ella, es
para siempre. ¡No es así! ¡es como si te
metieras en una caja y cerraras la tapa! No!
Eres parte del círculo, te mueves con él.
¿Saben? el número cuatro también habla con los
animales. Ama a los animales, puede literalmente hablar con la consciencia de
los animales y comprenderlos. También habla con las plantas, y realmente las
plantas tienen algo que decir. Ellos
aman al planeta, ¡son los número cuatro!
Ahora bien; si eres un número tres y estás
contemplando tu ombligo por tres días, realmente no vas a comprender al
jardinero, que se levanta muy temprano y planta cosas y lo ama, simplemente lo
ama. Pero si están en un círculo, trabajando juntos, y están entremezclados,
tal vez un poquito entrelazados, entonces todos se están ayudando unos a otros,
y todos tienen una pieza que es su especialidad, ¿oíste eso?
¡Es parte de un sistema grandioso! El que murmura a
los animales está murmurando para el número uno, el dos y el tres. Y el tres
tal vez no lo oiga, ni lo sepa, ni el dos ni el uno. Pero está sucediendo, necesita ser así,
porque la consciencia humana está conectada en formas cuánticas, no está
aislada. ¿Tú piensas que tienes un alma,
haciendo una sola cosa?
Hoy mi socio les mostró que la confluencia de la consciencia
es lo que mueve las cosas. No una, ni dos ni tres; ¡es una confluencia! Todo
mezclado! Si te estoy diciendo que hay
un anillo de trabajadores que se ayudan uno a otro porque entremezclan sus
consciencias pero tiene especialidades, eso eres tú. Pero cuando todo se combina junto, crea
cosas. Así es un sistema cuántico. Hecho
de muchas piezas que se mezclan con las otras ¡y algunos ni siquiera saben que
se están mezclando! Simplemente ES. Tú recibes ayuda de los que están meditando,
si no eres un meditador. Ellos se vuelven parte de ti; ¡el todo es más fuerte
que las partes, debido a eso! Y eso fue
el número cuatro.
¡Oh, hay tantos cuatros! Algunos humanos nunca se mueven de ese eje
del amor del planeta Tierra, y ni siquiera se llaman a sí mismos almas
antiguas; solo son trabajadores de la tierra. Ni siquiera saben nada del
akash. Solo saben que por alguna razón,
lo único que quieren hacer es estar con la naturaleza y con los animales y eso
es todo lo que quieren hacer. Nunca se
dan cuenta de que lo comparten con el número tres, y con el número dos, y con
el uno que trabaja en los sistemas, y al trabajar en los sistemas también está
abrazando al árbol. Y que Gaia es
sentida en todos los departamentos a causa del número cuatro. El número cuatro
siente la paz a causa del número tres, porque este está haciendo su trabajo,
sentado allí horas y horas, quieto y meditando pacíficamente por el resto de
ellos. Para el número uno, que está
saliendo y empujando, empujando, empujando para cambiar al planeta para el
resto de ellos. ¡Es hermoso!
El número cinco... Por ahora es el último. Cambio.
¿Quién es el que hace mayores cambios en el planeta? ¡Tiene que ser el
número uno! Pues no lo es. El número uno: él hace su trabajo, ella hace
su trabajo, de una manera tan concentrada que es tan puntual ¡que va a requerir
años para marcar una diferencia! Y
luego, solo para ciertas personas. No,
no. El que marca la mayor diferencia es
el número cinco. El número cinco cuenta
con más almas antiguas que cualquier otro departamento (se ríe). Yo los llamo anclas.
Ellos anclan al número uno, al dos, al tres y al cuatro. ¿Qué hay de
bueno en abrazar un árbol toda tu vida? ¿Con quién vas a hablar? ¿A quién vas a
ayudar? La respuesta es: a todos los
demás, debido a tu relación con el planeta. ¿Ves cómo funciona esto?
Ahora bien; el número cinco va a anclar al número
cuatro y especialmente al número tres, que se iría flotando si no fuera por el
ancla. Y el número uno, ¡que ni siquiera
quiere parar para oler las rosas! (se ríe). El número cinco es esa alma antigua que hace
su vida, sin escribir un libro, ni subir a un escenario, sin hacer algo
"importante", abro y cierro comillas, según ustedes perciben la
importancia, sin comprender que están caminando por el planeta como caminaban los Maestros, un día tras
otro, diseminando la acción compasiva.
La compasión, una palabra clave que hemos usado una y otra vez, es lo
que el planeta necesita para cambiar, y a raíz de tus acciones y de quienes te
ven, el planeta se mueve. Todos los días vas a trabajar, tienes amigos, tienes
familia. ¿Cómo los tratas? ¿Cómo actúas
en las rutas, cómo actúas en un pasillo? ¿Eres compasivo, ves a Dios en los
demás? Así es el que ancla! Hace más para ayudar al planeta que los otros
cuatro, todos juntos. El que ancla, es
la compasión que este planeta necesita para que todos los otros puedan
trabajar.
Todos necesitan lo que todos aportan. ¿Quién eres
tú? Tal vez eres una combinación de
varios; está bien, porque ellos no son singulares. Yo los puse en cinco
compartimientos. Ahora voy a quitar las paredes de esos compartimientos y
mezclar todos, del uno al cinco, en una batidora. ¡Eso es cuántico!
Ustedes no comprenden eso realmente. Pero ahora saben que hay un sistema. Es por
eso que hay tantos intereses diversos, y puedes decir "¿Cuál eres
tú?" o "¿Qué estás haciendo?" sin comprender que estás haciendo
todo. ¡Estás sosteniendo a todos los otros!
Número cinco: quiero que escuches esto. Lo que estás
haciendo, al caminar simplemente por este planeta en forma compasiva, ¡es
crítico! Sin esto, ¡nada lograrían los del uno al cuatro! El número uno puede mandar a golpes un
mensaje para una Tierra no compasiva, y no importaría para nada. El número dos podría tener sistemas de
sanación para una Tierra no compasiva, y nadie lo escucharía. El número tres se va a sentar diciendo "aum"
durante años, y no le va a hacer ningún bien a una Tierra no compasiva. El
número cuatro puede abrazar todos los árboles que quiera, y estar conectado con
Gaia, pero a menos que haya una consciencia compasiva en el planeta, nada
cambiará. Número cinco, parecería que
digo que eres el más importante. No realmente.
Solamente eres importante (se ríe).
Cuando se vayan de este lugar, piensen en esto. Toda
acción de bondad y compasión que hagan, que esté fuera de la naturaleza humana
que han estudiado y les dijeron que era correcta, todo lo que han aprendido en
psicología, todo lo que hagan que sea compasivo, cambia a los que los rodean.
Ustedes son notados. Las personas los notan, porque eso no es lo normal.
¿Han visto Los programas de televisión, esos que los que venden programas de TV de
vieja energía creen que a ustedes les gusta mirar? "Encendamos y veamos cómo se pelean las
familias." Como si ustedes no
tuvieran bastante de eso y quisieran un poco más (se ríe). ¿Qué tal un
programa que podamos encender la TV y ver que suceden cosas compasivas? Miremos a las personas ser agradables unos
con otros, y que ocurran victorias, y que haya lágrimas de alegría y compasión
porque las personas se aman unas a otras y hacen cosas inesperadas, que tienen
los resultados más benévolos. ¿Qué clase de programa funcionaría? Algún día, así será.
Si observas el marketing de hoy, lo que sucede hoy,
ves vieja energía; todavía está allí.
Por eso te destacas cuando eres compasivo; las personas no lo esperan.
Estás en una fila y ves a un desconocido que tiene que hacer algo antes que tú
a causa de sus actividades, y tú te haces a un lado y dices, "Ven, entra
aquí." Y te miran y dicen "¿Eres
real?" Es una cosa compasiva
pequeñita, porque estás viendo la necesidad de otro, y comparándola con tus
necesidades, y dándote cuenta de que puedes hacer algo para un resultado más
benévolo y ayudar a su sincronicidad.
Eso es Maestría. Es Maestría. El
número cinco.
Queridos, así es como funcionan los humanos. Un
sistema armado de almas antiguas y trabajadores de la luz, donde todos
desempeñan sus papel específico propio, o tal vez dos, no solo uno, para una
confluencia de energía que resuelve este acertijo en un hermoso anillo
dorado. No usan las mismas vestimentas,
no se inclinan en la misma dirección, no hablan el mismo idioma, ni siquiera se
conocen entre sí. Y eso es lo que va a cambiar al planeta.
Esto es solo el principio. Hay más. Pero la premisa es
clara: cada uno tiene su nicho que depende de quiénes son, de cuánto han
vivido, de cuál es su sentimiento sobre lo que tienen que hacer. Esto tal vez empiece a explicar para algunos
de ustedes, que se sienten llamados en alguna dirección y no en otra, y se
están lamentando psicológicamente porque
creen que no están a la altura de su vecino que está haciendo algo que ustedes
creen importante. Quiero que cambien eso ahora mismo, porque Dios los ve
resolviendo el enigma, igual.
Váyanse de este lugar distintos de como vinieron. Con un conocimiento que los eleva, y un
cambio de actitud sobre lo que podría estar pasando con ustedes.
Y eso es suficiente por hoy.
Yo soy Kryon, enamorado de la humanidad.
Y así es.
Kryon
Desgrabación y traducción: M. Cristina Cáffaro