Canalización de Kryon por Lee Carroll
Miércoles con Kryon – 5 de Febrero de 2025
¿Tienes Miedo del Amor?
Saludos,
queridos, Yo soy Kryon del Servicio Magnético.
¡Qué
pregunta! Y me podrían decir, “No, no tengo miedo del amor, Kryon”. ¿Realmente?
Les
voy a contar una historia. Y la historia va a enfatizar lo que podría ser el
amor. Nosotros hablamos del amor de una manera que tal vez ustedes no han oído
antes. Hay muchas clases de amor. De hecho, hay idiomas en el planeta que
tienen muchas palabras para “amor”, dependiendo de cómo se usan.
La
más grande es aquella que ustedes dicen que viene desde arriba. En su idioma,
eso significa, desde el Creador. Algunos
dicen que es el amor de Dios, el amor del Espíritu. ¿Tendrían miedo de eso? Y
yo voy a decirles algo: la mayoría de ustedes lo temen y ni siquiera lo saben.
Porque no se aviene bien con lo que les han dicho, o con lo que piensan.
La
historia que quiero contar es de cuando vine por primera vez al hombre en la
silla, que está sentado aquí ahora, canalizando esto que oyen, que es Kryon.
Estoy muy enamorado de todos ustedes, aun mientras escuchan esto. Esta es la
historia de él, desde mi lado.
Cuando
él finalmente se sentó en la silla, este ingeniero a mitad de sus cuarentas, él
dio un ultimátum, podrían decir, él estaba cansado de lo que ocurría en su vida
y de lo que le decían, y las sincronicidades que lo ponían en la silla, pero
tenía que ver por sí mismo si había algo allí. Entonces, lo que él le dijo al Espíritu,
mientras nosotros nos reuníamos a su alrededor, figurativamente conteniendo
nuestro aliento, podrían decir, los guías, los ángeles, todos nosotros. Él
dijo: “Si estás allí, muéstrame” (se ríe)
Yo no tengo palabras en el idioma de ustedes, pero tengo mucho amor. Ese es el
punto en que tuvimos permiso para mostrarle.
Sabíamos
quién era él; no podíamos hacerlo sutilmente; tenía que ser algo que recordar
toda su vida, que o bien lo cambiaría, o lo pondría en negación permanente para
siempre. Se sentó en la silla y lo sofocamos con el amor de su alma, el amor
del Creador, el amor de sus ancestros. Lo sofocamos. Se derritió. Sollozó. Entró en un estado que no esperaba, y saltó
de la silla, enojado, (se ríe), y
supimos que lo teníamos. Lo teníamos con el amor que nunca había experimentado
antes. Y de esto es que yo quiero hablar.
Desde
su punto de vista, puede que él incluso haya tenido un viaje al otro lado del
velo por solo un momento, puede haberse sentido en el hogar, puede haber
sentido a los ancestros, puede haber sentido todo lo que había para sentir. Y
cada célula de su cuerpo despertó con el amor. Y lo que pasó es que eso lo
incomodó. Más tarde, antes de sentarse en la silla, dijo: “no hagan eso otra
vez; dénmelo lentamente, porque no puedo soportarlo.” Y eso hicimos. Pero
obtuvimos su atención.
Y
cada vez que se sienta, como hizo hoy, nosotros entramos inmediatamente,
rápidamente, sin cuestionar, para que él pueda sentir lo que siente ahora. Está
en un lugar diferente, podrían decir, lleno de seguridad, lleno de un amor que
es permanente, e incondicional, y que no cambia. Ese es el amor que el Espíritu
tiene para ustedes.
El
resto es historia, con él, en cuanto él se tomó tres años para asimilar la
realidad desde quién él era hacia quién él se convertiría; tres años. Ahora
bien, en esa época de 1989 y en esas condiciones, y en la cultura de aquel
momento, esto es comprensible.
Hoy
hay muchos que están despertando de esta manera, casi de la noche a la mañana.
Empiezan a ver que el amor que sintieron y están sintiendo, es nuevo, y estaba
siempre allí, y entonces le dan la bienvenida a entrar, y dicen: Yo sabía que
era posible. ¿Tienes miedo del amor? Tu cultura no abraza semejante cosa.
Quieren que seas un poco más serio, tal vez; incluso si eres persona divertida,
ellos no quieren que seas espiritual de pronto, lleno de tanto amor, que vas a
cambiar hacia ellos. Hay una presión cultural para no despertar. Algo de eso es
creado por tus instituciones, las que son espirituales, que dicen que te quedes
en el rincón, que no eres digno, haz esto, no hagas aquello, por tanto este
amor nunca puede llegar a ti. Puedes entonces creer eso, y ellos te mantienen
controlado, se podría decir, para que no puedas decir “Muéstrame”.
No
tienes miedo del amor, tal vez, desde un individuo, romántico, no tienes miedo
del amor que viene derramándose sobre ti, desde un animal, tu mascota. Le das
la bienvenida cuando viene. Pero para recibir el amor del Creador, eres muy
cuidadoso. Y algunos de ustedes dicen, Quiero ir, quiero ir a todas partes con eso.
No quiero hacer eso. Porque los miedos son de que cambiarás. Eso es lo que te
dijeron, que estarás cambiando. Me gustaría decirte la verdad, ahora mismo.
¿Cambiarás? Absolutamente. El cambio va a ser benévolo y hermoso, uno que nunca
olvidarás. Te llevará a una pacífica expresión, una existencia diferente del
viejo tú. Una que no tiene preocupación
todo el tiempo, que no tiene miedo todo el tiempo. Que ve una percepción de los
demás totalmente diferente de la que tendrías antes de ese momento en que
dijiste “Muéstrame”.
Tienes
miedo porque te dicen que deberías temer. Y luego están aquellos de ustedes,
almas antiguas, que empiezan a decir ¿Qué tal si yo siempre he tenido la
capacidad para este amor? ¿Qué tal si ha estado siempre aquí dentro de mí? Y
luego yo lo guardé. ¿Qué tal si lo he encerrado con los filtros de mi época y
mi día? ¿Qué tal si es más grande que lo que pensé?
Este
mes es celebrado por el amor. Es ciertamente el amor romántico, pero va mucho
más lejos: es permiso para hablar sobre el amor.
Esta
noche en el Círculo del Doce vamos a continuar esta idea de que hay mucho amor
a tu alrededor, que no necesariamente estás aceptando, o enterándote, o -
¿estás listo? – aprovechándolo. En otras palabras, ¿qué tal si el amor mismo,
especialmente desde el Creador, tiene una energía que puede penetrar en tus
células, tus células, tu biología misma, qué tal si este amor puede establecer
las cosas para ti? Eso que es tu consciencia, o las cosas que tal vez te
molestan. ¿Qué tal si es más que simplemente sentarse a ser amado? ¿Qué tal si
es una savia, un bálsamo, podrías decir, de paz para ti, que fluye sobre ti, se
derrama sobre ti Que puedes sentarte y decir ¡Ohh! Si hubiera sabido que
existía esto, lo hubiera hecho cuando era niño. Si hubiera sabido que existía
esto, lo hubiera hecho en primer lugar tan pronto como desperté, si hubiera
sabido que existía esto, hubiera sido una persona diferente hace mucho tiempo.
¡Eso
es lo que les estamos diciendo! queridos. Ustedes son magníficos. Son
tiernamente amados, todos ustedes. A eso que ustedes dicen que es Dios, la
Fuente Creadora, tal vez sea tiempo de que le digan “Muéstrame”
Y así
es.
Kryon
Transcripción y
traducción: M. Cristina Cáffaro