Canalización de Kryon
por Lee Carroll
11 de Agosto de 2014 –
en Hikinaakale Heiaui, Hawaii
Desgrabación del
audio y traducción: Cristina Cáffaro
Retiro Lemuriano con Kryon
Día 2
Habla y canta Kahuna Kalei´iliahi (en el audio, a partir de
los 44 segundos hasta un minuto y 22 segundos)
Anoche, cuando me fue a dormir,
los antiguos que están aquí se me mostraron, los vi aquí parados, mirando hacia
aquí. Puedo verlos ahora en la multitud,
y están inclinándose ante nosotros. Quiero compartir esta visión con todos
ustedes. Como dije antes, ustedes son los que han estado en la Tierra y han hecho este
viaje hasta aquí; para algunos fue muy difícil, sabemos lo que tuvieron que
atravesar para poder llegar. De manera que ellos los honran y los aman. Más temprano, cuando estaba preparando el
puolou, canté el cántico; me gustaría hacerlo otra vez, es mi regalo para
ustedes de parte de ellos; esta vez lo voy a traducir.
Desde la Luz , desde los dioses, desde
el cielo;
Desde la quietud, desde el
cielo;
Desde la felicidad, desde el
cielo;
Desde la vida, desde el cielo;
Desde los dioses, desde el Dador
de Todas las Cosas.
Lee Carroll
canaliza:
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del
Servicio Magnético.
Yo sé dónde estoy. Para los que escuchan, déjenme preparar el
escenario. Y para los que están aquí, en forma corpórea, disfrutando de esto y
sintiendo la energía, déjenme también pintar este cuadro.
En la
Isla Jardín , hoy conocida como Kauai, pero
con un nombre completamente diferente en los tiempos lemurianos antiguos,
ustedes están sobre la costa, oyen el hermoso ruido de las olas rompiendo,
sienten los vientos alisios y el bello clima, y el sol, en este lugar llamado
paraíso. En este mismo lugar había
nieve, glaciares. Pero el Heiaui donde
están ahora parados no estaba aquí entonces, porque siempre tenía que estar al
lado del océano. Cosa interesante en los
lugares sagrados en todo el planeta: cuando son sagrados para un grupo,
permanecen sagrados para los siguientes; la rejilla cristalina del planeta
registra su sacralidad. Aun cuando una
sociedad es aniquilada o se va, otra vendrá y tenderá a construir lugares
sagrados en exactamente los mismos puntos.
Para dar la información que ahora
entregaré, he pedido permiso a los ancestros que caminaron en este lugar, que
siempre lo han hecho, los guardianes de este lugar y su sacralidad, conocidos
para todos nosotros. Hay algunos lugares
en el planeta que deben permanecer puros y sagrados y perdonados, ya sea en el
hemisferio sur o en las cumbres de las montañas, o en los valles desiertos o
junto a las playas; hay muchos, y éste es uno de ellos. De modo que los ancestros dicen: “Procedan”,
y así lo haré.
Lemuria: están parados sobre ella,
y es el recuerdo de lo que aquí sucedió para la humanidad lo que hoy celebran.
Aquellos de ustedes que realmente caminan sobre el polvo de este lugar, se
celebran a sí mismos en él. Pero todas
las almas antiguas en este lugar y escuchando esto celebrarán uno de los
procesos que tuvo lugar no sólo en este sagrado Heiaui, sino en esta isla.
La energía de la cumbre de la
montaña, mucho antes de ser una isla, era más que sagrada; la energía siempre
fue amor puro. Aquí tuvieron lugar
ceremonias de amor, no sólo entre seres humanos; ceremonias de amor a los
antiguos, ya sea el amor de Dios, el amor a la tierra, el amor a los ancestros,
el amor por los niños, el perdón para los guerreros; eso es amor. Ciertamente hay restos de todo ello en las
cumbres de las montañas, las islas, hasta el día de hoy. Pero este Heiaui en particular se ha
conservado bastante bien porque fue muy utilizado.
La letra “E” en Lemuria va a
representar “emerger”. Emerger es una
palabra interesante en cualquier idioma, si se interpreta correctamente. Pero en nuestro contexto, es el surgimiento
del alma humana, el despertar al día de luz, desde la oscuridad que no tenía a
un creador adentro, a la brillante luz que estaba dentro de cada ser humano.
¡Esto fue una celebración de la vida! Y
se usaba diariamente, pero también en ocasiones especiales, que a menudo eran diarias. Bodas: comenzaban en el océano, por supuesto.
Este Heiaui, nacido al lado del agua, siempre ha sido; ha permanecido a través
de inundaciones y huracanes. Si ustedes pudieran ver los lugares sagrados que
hoy están bajo el agua, los reconocerían.
No crece mucho a su alrededor: son sagrados, aun en lo profundo del
océano. Por las mismas razones, éste es sagrado hoy.
Los bautismos de los niños de la
isla, según las tradiciones de esta isla, se celebraban aquí a menudo; no
siempre, porque las tradiciones cambiaron a través de los años, pero cuando el
Heiaui servía al propósito para el que se había designado, el bautismo de los niños
tenía que ver con el amor. Hoy en día
ustedes lo llaman dedicación, bautizo, lo que sea. El reconocimiento de que el niño pertenece a
los antiguos, que el niño pertenece al Creador, y que el niño pertenece a
Gaia. Comienza en el océano, de donde viene
toda vida, decían los antiguos. De modo
que los niños estaban aquí, y las bodas eran aquí. Las ceremonias de perdón se
hacían aquí también, igual que las ceremonias diarias a la vida misma y a la
renovación de todas las cosas, cada día.
Ustedes emergieron de un lugar oscuro a un lugar de luz, como la misma
historia de la creación que llevó a la humanidad a emerger a la luz y darse
cuenta, por libre elección, de que tenían un Creador dentro de sí. Este Heiaui tiene que ver con el surgimiento
de la alegría, de la creación, de lo nuevo y de la vida. Importante; en la isla todos sabían para qué
era esto, y todos lo visitaban muchas veces.
Un santuario, si se quiere, con aspecto diferente del de hoy, si se
quiere. Pero ustedes están aquí, en este
año de 2014, cuando se inicia el cambio, para honrar el surgimiento de este
planeta a una nueva energía que refleja aquello para lo que se construyó el
Heiaui.
Alma antigua: ¿ves la conexión? ¿Puedes ver que los antiguos están sonriendo
ahora, alma antigua? Si te lo permites,
puedes sentirlos aquí, lemuriano. Las
cosas estaban conectadas; no fue tanto tiempo atrás, queridos. Este planeta sólo ha llegado a emerger en los
últimos doscientos mil años, ¡y la
Tierra ha estado aquí cuatro mil millones de años! No fue tanto tiempo atrás, y muchos de
ustedes estaban aquí.
Entonces, en este día quiero que
recuerden lo que han aprendido sobre este lugar y los significados que aquí
hay; permitan a los ancestros cantar canciones de recordación, ¡de alegría! ¿De
qué estás emergiendo, querido, mientras oyes esto? ¿Y a dónde irá esto desde aquí?
Celebren hoy esta tierra sobre la
que caminan, porque los ancestros lo hacen.
Y
así es.
Kryon
Desgrabación del audio y traducción: Cristina Cáffaro